Niall Ferguson// Jay Mens
«La opinión de Netanyahu de que no hay nadie a la altura de las circunstancias podría ser cierta. Pero después de Bismarck vino Caprivi. Y finalmente llegó Bethmann-Hollweg, cuyos errores de cálculo sumieron a Europa en la guerra de 1914. Los más probables sucesores de Netanyahu en el partido Likud son populistas declarados sin su sensibilidad histórica ni su facilidad para el idioma inglés. Así pues, deja a su país un futuro tan incierto como el que Bismarck dejó al suyo»