Hazte premium Hazte premium

Reunión «post-mortem» de los gobernadores republicanos Los gobernadores del partido de John McCain mantuvieron ayer en Miami la primera conferencia tras la derrota el 4-N

ANNA GRAU CORRESPONSAL

NUEVA YORK. Los republicanos que gobiernan estados de la Unión y que están de humor para hablar del futuro del partido se reunieron en Miami en torno a un evento que «The New York Times» no ha dudado en bautizar como «conferencia post-mortem». En ella hubo autoflagelación y carreras hacia las elecciones de 2012. Entre los corredores destacan Sarah Palin y el gobernador de Luisiana, el descendiente de inmigrantes indios Bobby Jindal. ¿La Hillary y el Obama republicanos?

«He estado muy ocupada desde la última conferencia», dijo Palin, «he tenido un hijo, he aumentado brevemente mi guardarropa y he conocido a algunos vips con verdadero impacto en la sociedad, como Tina Fey». Palin intentaba así levantar un cortafuegos humorístico frente a las voces que la acusan de rústica, de cabeza hueca y de haber hundido ella sola la campaña de McCain.

«Ella no está ni mucho menos acabada», dicen de Palin el gobernador de Texas que la presentó en la conferencia, Rick Perry, o la que fue la primera candidata femenina (demócrata) a la vicepresidencia, Geraldine Ferraro. Ambos aconsejan no subestimarla. El reto es cómo mantener la llama desde Alaska. Palin tiene ante sí varias oportunidades de optar a un puesto en el Senado, siguiendo los pasos de Clinton.

La interesada se limitó a emitir sonrisas deslumbrantes y a pensar «en el futuro, pero el futuro no es el 2012 sino trabajar por los presupuestos de nuestros estados y para tener los máximos gobernadores republicanos posibles». Palin dijo que su partido no debe caer en la trampa de ser «el partido de lo negativo, del todo está mal, de ir buscando sólo defectos». En lugar de eso insistió en tender la mano a la Administración Obama.

Obama inspira a Jindal

Mientras Palin intentaba ser lo más parecido a una Hillary republicana -«no hay techos de desigualdad en este país», proclamó-, Obama parecía inspirar a Jindal. El gobernador de Luisiana se alzó como la voz autocrítica de la conferencia, afirmando que los votantes «tuvieron razón al echarnos» porque el partido se ha apartado de sus más nobles esencias conservadoras para devenir una formación extremista y divisiva. «No podemos ganar si perdemos tanto voto de mujeres, tanto voto hispano, tanto voto afroamericano; tenemos que integrar a todos, y seguro que podemos», concluyó, al estilo «Yes, we can».

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación