Los desaparecidos en las marchas cobran mayor presencia en Colombia

Hoy, en Colombia, nadie se atreve a certificar cuántos desaparecidos han dejado estos 15 días de protestas. Para la Defensoría del Pueblo, son 168 personas, según lo reportó el martes, una tercera parte de estos casos concentrados en Bogotá, Cali y Medellín; de la cifra total, 148 hombres y 20 mujeres desaparecidos en el contexto de las marchas. Y anotó que 277 personas que estaban registradas como desaparecidas fueron localizadas en diferentes ciudades de Colombia. Por su parte, la Unidad de Búsqueda de Personas Dadas por Desaparecidas (UBPD) alertó que sería 379 las personas desaparecidas en el contexto del paro nacional.

Pero hace una semana, las cifras eran otras: la Defensoría habló de 89 registros de desapariciones, de los cuales 47 personas ya fueron ubicadas. Y hace una semana, 26 ONG entregaron un informe a la Defensoría en el cual las cifras de personas desaparecidas entre el 1 y 6 de mayo, en el marco de las protestas nacionales, están muy distantes de los números oficiales: 471 personas desaparecidas , de las cuales ya fueron localizadas 92. De las 379 restantes no se tiene información, algunas de las cuales podrían estar detenidas e incomunicadas o detenidas pero a sus familiares no se les entrega información puntual de su lugar de reclusión.

Da un poco de vergüenza decir, con semejante historia de violencia y rutas para denunciar desapariciones, que en Colombia aún no somos capaces de unificar datos y tener unos mecanismos confiables y expeditos que registren los hechos para ganarle tiempo al tiempo, fundamental para todo desaparecido.

Las propias entidades del Estado no se ponen de acuerdo, o ninguna quiere comprometerse con un número precisamente por la dimensión que acarrea. Ninguna cifra de desaparecidos es buena y lo ha reiterado con su reporte de esta semana el Comité de la ONU sobre Desapariciones Forzadas , que afirmó que las desapariciones en Colombia, en general, han seguido sucediendo inclusive en tiempos de pandemia, y que el país no cuenta realmente con una política integral para prevenir este delito.

Se estima en 84.330 adultos y 9.964 menores de edad el número de desaparecidos en Colombia, según datos de la Fiscalía, pero incluso estos son cuestionados. Por su parte, el Comité de la ONU señaló que hay 24.000 cadáveres inhumados aún por identificar , más de 4.000 cuerpos de víctimas de desaparición forzada que aún no han sido identificados, de los 10.000 exhumados. Además, el portal de noticias de la ONU cuestiona «los escasos resultados en la búsqueda de cerca de 1.000.000 personas desaparecidas, registradas por la Fiscalía General de la Nación hasta finales de 2020».

Estas aterradoras cifras se refieren al acumulado de personas desaparecidas en el marco del conflicto armado, principalmente. Y a pesar de que es una realidad conocida y padecida a lo largo y ancho del país, la situación que se vive hoy es bastante nueva, si no inédita: desaparecidos durante marchas de protesta.

Como son desaparecidos recientes, por diferenciarlos de algún modo, podría significar «desaparecidos vivientes», tal vez, y la puesta en marcha del mecanismo de búsqueda urgente por parte de la Defensoría puede hacer una real diferencia y así localizar a las personas. Allí se lograría marcar una importante diferencia frente a esos otros miles de desaparecidos –las cifras nunca son exactas aquí– sobre los cuales nunca se pierde la esperanza del reencuentro aún en medio de la certeza de que no regresarán jamás.

El presidente Iván Duque dijo en la noche del martes que, de acuerdo con las investigaciones avanzadas por las autoridades, este es el balance de los hechos con participación de miembros de la fuerza pública: 65 acciones disciplinarias, de las cuales 27 obedecen a abuso de autoridad, 11 por agresión física, ocho por homicidio, 19 por otras conductas y que, además, la Fiscalía adelanta otras 20 investigaciones, a las que se suman seis de la Justicia Penal Militar y 10 más de la Procuraduría. La palabra 'desaparición' no aparece, a pesar de que la pregunta por los desaparecidos cobra mayor presencia cada día.