El Cairo ensaya el traslado de Ramsés II
Una réplica de la estatua de Ramsés II, de 83 toneladas, superó hoy con éxito el último "ensayo general" para sustituir a la original antes de que ésta sea retirada del bullicioso centro cairota y

Una réplica de la estatua de Ramsés II, de 83 toneladas, superó hoy con éxito el último "ensayo general" para sustituir a la original antes de que ésta sea retirada del bullicioso centro cairota y trasladada al nuevo museo egipcio.
La gigante réplica, de 11,5 metros de altura, fue transportada desde la céntrica plaza de Tahrir hasta la sede del "Gran Museo Egipcio", cercano a las Pirámides, en un viaje nocturno que duró ocho horas.
Con este ensayo, el Consejo Supremo de Antigþedades de Egipto quiere asegurarse de que no se corren riesgos inesperados durante el traslado el próximo 25 de agosto.
Los arqueólogos esperan con su traslado preservar la estatua de Ramsés II, seriamente deteriorada debido a la contaminación acústica y ambiental que ha sufrido desde que fue instalada en 1954 frente a la estación central de ferrocarriles de El Cairo.
A las 02.00 hora local (00.00 GMT) la copia de la estatua empezó la travesía de unos 30 kilómetros, la misma que recorrerá la original, esculpida hace unos 3.000 años con bloques de granito de Asuan, situado a 950 kilómetros al sur de El Cairo.
Una grúa levantó la réplica colosal y la posó en posición vertical en una caja metálica antes de colocarla en una plataforma, especialmente diseñada, que junto a la cabina del camión que la remolca mide 52 metros.
Cuatro banderas de Egipto decoraban el vehículo que completó el recorrido a 5 kilómetros por hora e incluso redujo la velocidad en los puentes y cerca de algunos árboles para garantizar la seguridad de la estatua.
Una escolta de la policía y varios autobuses de ingenieros de la compañía "Arab Contractors", responsable del proyecto, y de arqueólogos, acompañaron al camión con la réplica para estudiar los posibles riesgos con los que se puede encontrar la estatua original el día de su traslado.
A pesar de ser viernes, día festivo para los musulmanes y que las calles permanecían prácticamente vacías, el traslado de la réplica obligó al cierre de las carreteras para no estorbar la marcha de la colosal estatua y su carroza, que juntos pesan 240 toneladas.
Además, algunos árboles tuvieron que ser cortados para facilitar el paso de Ramsés II, uno de los faraones más importantes en el Egipto Antiguo.
"Se trata de la segunda y última prueba real del traslado de la estatua de Ramsés II utilizando una réplica de hormigón armado, que tiene el mismo peso que el original", declaró a Efe el director de la compañía responsable del traslado, Ibrahim Mehlib, que añadió que el coste de todo el proyecto se aproxima al millón de dólares (790.000 euros).
Tras un recorrido cargado de emoción y con la esperanza puesta en el éxito del viaje, el equipo técnico que acompañó a la pieza, compuesto por 200 personas, llegó a las 10 de la mañana al patio del nuevo museo, cuya construcción aún no se ha acabado, y dieron por concluido el ensayo general.
Con un delicado sistema de elevadores hidráulicos, la colocación de la estatua tardará entre dos y cinco horas, detalló Mehlib, que calculó que el tiempo total del traslado de la estatua original será de entre diez y doce horas.
El "Gran Museo Egipcio", la que será la nueva casa de Ramsés II, situado en la carretera desértica entre El Cairo y Alejandría, se prepara ahora para recibirlo lejos de la contaminación de la capital.
Tras su hallazgo en 1888, la estatua fue colocada frente al templo del Dios de la Magia Ptah, en la antigua capital faraónica de Menfis, en la que hoy se encuentra la localidad de Mit Rahina, a unos 19 kilómetros al suroeste de la capital.
Ramsés II, que nació en 1304 a.C. y murió en 1237 a.C., es también recordado por el templo de Abu Simbel, que ordenó levantar para preservar su memoria hace 3.300 años en la orilla occidental del Nilo a 1.200 kilómetros al sur de El Cairo.
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