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El poema visual «De profundis», cine de animación al óleo, se presenta en Galicia

ABCLA CORUÑA. Los dibujos del pintor y guionista Miguelanxo Prado y la música del compositor Nani García se unen en el filme de animación «De profundis», realizado con pinturas al óleo. Se trata de

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LA CORUÑA. Los dibujos del pintor y guionista Miguelanxo Prado y la música del compositor Nani García se unen en el filme de animación «De profundis», realizado con pinturas al óleo. Se trata de una película sin diálogos, en la que ambos creadores rinden homenaje al mar. El miércoles se presentó en La Coruña, donde el próximo día 18 tendrá lugar el preestreno con un mano a mano entre Ainhoa Arteta y Carmen Rey, que interpretarán el tema principal de la obra con la Orquesta Sinfónica de Galicia.

En una entrevista concedida a Ep, Prado explicó que su película «es una gran metáfora, un poema visual y sinfónico que no pretende imponer su realidad al espectador a través del prodigio técnico, sino lograr su complicidad sentimental y estética». El artista, que se inició en el mundo del cómic de adultos («Cimoc», «Cairo»), ha trabajado en el semanario «El jueves» y fue llamado por Spielberg para trabajar en la serie de animación «Men in black». Miguelanxo Prado explicó que su obra es «un homenaje al mar, al océano» y cuenta «una historia sencilla, de amor y fascinación», basada en el mito de Ulises y Penélope: una mujer que espera en su casa al lado del mar la llegada de su amor, un marinero que partió en un pesquero.

Pozo de miedos y sueños

«El mar acaba siendo un auténtico pozo de miedos, de sueños y acaba mitificado y mistificado», subrayó Prado, quien buscaba una técnica de animación no tradicional, «cansado» de los proyectos que le «imponían renunciar al concepto de autoría». El creador coruñés explicó que en las películas de animación clásicas los dibujos son «muy sencillos» para que puedan ser copiados por un equipo de cientos de personas, con el fin de lograr una animación más real. En «De profundis», cuyo coste no llega a los dos millones de euros, Prado ha invertido 12 horas diarias durante dos años. El mismo optó por realizar todos los dibujos para conservar el estilo que lo define. Las escenas «intermedias», las que dan movimiento a la imagen y son realizadas por los copistas con ayuda del ordenador, han sido las menos posibles.

En su estreno, la cinta se proyectará en alta definición, con unas pantallas laterales que mostrarán un mar embravecido. El director pretende crear «un ambiente húmedo marino pulverizando agua del mar». Hasta ahora, todos cuantos han visto sus imágenes y escuchado su música han quedado prendados de esta película diferente.

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