¿Tensión entre Kate Middleton y el Rey Carlos III?
La popularidad de la Princesa de Gales parece no sentar demasiado bien a algunos de los principales miembros de la Familia Real británica

Hace ya unos meses que Kate Middleton (43 años), ha comenzado poco a poco a retomar su agenda oficial acudiendo cada vez más frecuentemente a sus compromisos públicos tras concluir su tratamiento contra el cáncer y la remisión del tumor. Una forma de recuperar la normalidad tras más de un año de ausencia en la que la Princesa de Gales ha sido vista en muy contadas ocasiones.
Sin embargo, la esposa del Príncipe Guillermo afronta esta nueva etapa llena de esperanza, aunque con una visión distinta sobre su rol en la Familia Real británica y su propio bienestar.
Fue a principios del pasado mes de noviembre cuando Kate realizó su regreso público acudiendo al Cenotafio de Whitehall (el Domingo del Recuerdo), uno de los actos más solemnes enmarcados dentro de la festividad del Día del Recuerdo, con la que se homenajea a todos los caídos en servicio y a los veteranos de las Fuerzas Armadas. Con su presencia en el Royal Albert Hall, en Londres, se consolidó su regreso a una agenda pública que había estado suspendida durante varios meses debido a su enfermedad.
Su última aparición pública fue hace una semana, con motivo del Día de la Commonwealth. Para su gran momento, la Princesa de Gales escogió un vestido rojo escarlata de Catherine Walker adornado con un gran lazo en el escote, un traje que ya había lucido anteriormente en el concierto de villancicos Together At Christmas de 2021. Sin embrago, lo que realmente llamó la atención del estilismo fueron las joyas elegidas que portaban una gran carga sentimental al convertirse en un claro homenaje a la difunta Princesa Diana. Se trata de unos pendientes de perlas Collingwood, con forma de lágrima. Una exquisita joya que era una de las favoritas de la fallecida madre del Príncipe Guillermo. Además de los pendientes, Kate Middleton completó su estilismo con una gargantilla de perlas de Garrard que pertenecía a la difunta Reina Isabel II. Con todo ello, la Princesa de Gales volvió a ser elegida la más elegante de la Familia Real.

Sin embargo, tanto protagonismo por parte del pueblo para Kate parece que no sienta demasiado bien en Buckingham. Todo comenzó con su notable ausencia en el Día Internacional de la Mujer. La cuenta oficial de la Familia Real británica publicó un post en el que aparecían imágenes de las mujeres más relevantes de la monarquía, desde Reina Victoria, pasando por la Reina Isabel II, la Princesa Ana, la Reina Camila, e incluso la Duquesa de Edimburgo. Todas menos la Princesa de Gales. «¿Dónde está Kate? ¿No es la madre del futuro rey? ¡No hay respeto!», «Vaya. ¿Nada sobre la Princesa de Gales?», «Con todos mis respetos, eso fue una irrespetuosa omisión», «¿Crees que si no publicas su foto, la gente la querrá menos?», fueron tan sólo algunos de los comentarios que se pudieron leer a través de la red social.
A esto se le sumó que en el Día de la Commonwealth hubo un claro desprecio a la Princesa de Gales por parte del Rey Carlos III al no saludar a su nuera durante el acto oficial. Un reflejo de la tensión que podría existir entre suegro y nuera. «La ausencia de un saludo más personal no fue un desaire, sino que probablemente se debió a la naturaleza formal del evento», intentó justificar entonces la revista 'Hello!'.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete