Más problemas para Jay-Z: un rapero asegura ser su hijo, fruto de una relación con una menor de edad
Se trata del músico de Filadelfia Rymir Satterthwaite, cuya madre falleció en 2019
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El rapero Jay-Z
La vida pesonal de Shawn Corey Carter, la superestrella del hip-hop conocida como Jay-Z, parece estar a punto de desmoronarse. Tras ser acusado de violar a una menor de edad en el contexto de los escándalos sexuales que rodean el caso de Sean Diddy Combs, un joven asegura ser el hijo fruto de otra relación en principio sí consentida, peor también con una menor. Y para colmo, es rapero.
Rymir Satterthwaite ha afirmado que es hijo de Jay-Z y Wanda Satterthwaite, una mujer que presuntamente tuvo un encuentro sexual sin protección cuando tenía 16 años y se quedó embarazada. En una entrevista con el Daily Mail, Satterthwaite asegura: «Mi difunta madre, Wanda, tenía sólo 16 años cuando se quedó embarazada de mí, y durante años he buscado claridad sobre mi identidad. No se trata de codicia ni de espectáculo, sino de descubrir la verdad y garantizar que todas las partes rindan cuentas». Rymir asegura que su presunto padre no le ha escrito «ni una sola vez» para abordar las acusaciones de su parentesco biológico, «ya sea para negar o reconocer la paternidad, o para abordar por qué su abogado ha cometido este fraude».
Wanda alegó que ella y Jay-Z mantuvieron relaciones sexuales en 1992, cuando él tenía 22 años y ella 16, momento en que tenía un novio en el instituto llamado Robet Graves. Sin embargo, el debate en torno a la paternidad de Rymir surgió en 2010, sólo dos años después de que Jay-Z y Beyoncé se casaran. Tal como recoge The Mirror, la madre solicitó que un tribunal de Pensilvania ordenara tanto a Graves como a Carter someterse a una prueba de paternidad para descubrir la paternidad de Rymir, pero según ella los ayudantes legales de Jay-Z intentaron «subvertir el sistema legal» después de que saliera a la luz que Graves no tenía ningún parentesco con Rymir.
El equipo legal de Jay-Z argumentó que la doctora Lillie Coley, que era la tutora legal de Rymir después de que su madre le cediera la custodia en 2011, no tenía «jurisdicción» al haber disco presentada la demanda en otro estado. El juicio previo tuvo lugar en el condado de Camden, Nueva Jersey, el 13 de agosto de 2012, pero el caso fue desestimado posteriormente ya que Rymir era mayor de 18 años durante el juicio previo y las leyes de Pensilvania establecen que la paternidad debe determinarse antes de que el niño alcance la mayoría de edad. Sin embargo, el tribunal consideró que el caso debía juzgarse con arreglo a la legislación de Nueva Jersey, ya que allí la edad de «filiación» es de 23 años.
Este nuevo escándalo se suma al de la demanda civil presentada en octubre contra el amigo de Jay-Z, Sean Diddy Combs, que al volver a presentarse el pasado domingo incluía su nombre, relacionándolo con la violación de una niña de 13 años después de los MTV Music Video Awards de 2000. El cantante, de 55 años, ha negado rotundamente las acusaciones asegurando que son «evidentemente falsas» y que forman parte de una «campaña de extorsión», y tanto su mujer como su hija mayor le han apoyado públicamente. Su presunto hijo Rymir ha calificado de «atroz»la respuesta que ha dado a todas estas acusaciones. En una nueva entrevista, ha afirmado «es a la vez desgarrador y frustrante ver al Sr. Carter responder a las acusaciones con semejantes desvíos y ataques».
El abogado de la chica presuntamente violada a los 16 años, Tony Buzbee, ha informado de que su cliente podría cambiar la demanda civil a una penal, sobre todo después de la beligerancia con la que ha actuado Jay-Z estos días, pues el propio abogado texano ha denunciado que están intentando menoscabar su reputación acosándolo a él, a su familia e intentando desestimar el caso si la mujer no revela su identidad. En una declaración que ha enviado al correo del portal de noticias TMZ, Buzbee ha explicado que no han descartado en absoluto presentar cargos por violación contra Jay-Z ante las autoridades de Nueva York, lo que supondría que el caso pasa a ser penal y podría conllevar penas de cárcel para el rapero y esposo de Beyoncé.
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«Lo que suceda a continuación dependerá de mi cliente. Es su caso y lo que ella decida hacer lo sabrán a su debido tiempo», ha dicho el abogado, aprovechando que, según la ley del estado de Nueva York, no existe un plazo de prescripción para que las presuntas víctimas presenten una denuncia por violación en primer grado.
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