Suscríbete a
ABC Premium

La entrevista más personal de Alexandra, hija de Carolina de Mónaco y Ernesto de Hannover

La joven mantiene desde hace años una discreta relación con el DJ alemán Ben Sylvester Strautmann

Alexandra de Hannover, hija de Carolina de Mónaco, cumple 25 años: unida a su madre y alejada de su padre

Alexandra de Hannover gtres
Rocío F. de Buján

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Desde niña ha vivido sometida a la inevitable comparación con su hermana Carlota Casiraghi (38) y marcada por la tensa y poco ortodoxa relación entre sus padres, Carolina de Mónaco (68) y Ernesto de Hannover (71), pero ha encontrado la manera de ir construyendo su propia personalidad incluso en un entorno de tanta presión.

Hace unos días Alexandra de Hannover (25) concedió una entrevista con la revista 'Elle' en la que habló sobre el amor, el trabajo y la familia, entre otros muchos temas. «Hay momentos en los que me siento muy conectada con mi lado monegasco y otros en los que me identifico más con mi herencia alemana y austriaca», reconoció.

La joven se define como «creativa, sensible y perspicaz». Sobre su familia, afirmó que «me siento muy cercana a ellos y son algunas de las relaciones más importantes de mi vida». Contó que crecer con muchos hermanos mayores ha resultado «muy interesante»: «Ha hecho que el proceso de madurar sea menos intimidante. Verlos mudarse, formar hogares y criar a sus hijos ha hecho que el futuro me asuste menos».

Carolina de Mónaco

También reconoció la profunda admiración que siente por su madre y la maravillosa relación que tiene que con ella: «Es muy valiente y jamás entra en pánico, es increíblemente fuerte, pero también tranquila ante distintas situaciones. Siempre he sabido que puedo acudir a ella con cualquier problema y que lo abordaremos juntas desde la calma y sin dramatismo. Es realmente un pilar para todos nosotros», afirmó.

Alexandra de Hannover junto a su madre Carolina de Mónaco gtres

Además, Alexandra se siente afortunada también en el plano amoroso. Desde hace ocho años comparte su vida con Ben-Sylvester Strautmanna, un joven alemán de su misma edad con el que mantiene una relación idílica. Hijo de una familia multimillonaria alemana, se mudó a Mónaco con 10 años y comenzó a jugar de manera profesional al baloncesto, llegando a conseguir premios y medallas. Una profesión que no llegó a culminar cuando decidió cambiar de rumbo hacia la música. Actualmente es Dj y 'pincha' en los mejores clubes de la Costa Azul. Ninguno se muestra contrario a mostrar su relación y su amor en público, pero bien es cierto que intentan mantenerse en un discreto segundo plano para mantener reservado su vida privada.

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación