La dura lucha de Kourtney Kardashian para tener un hijo: de beber semen a someterse a cinco FIV

¿Quién dijo que la vida de Kourtney Kardashian era fácil? El clan es conocido por llevar su vida al límite y hacerla pública sin pudor alguno, incluso los detalles más escabrosos. Y lo último es el devastador y alucinante proceso que ha llevado a cabo la mayor de las hijas para dar a luz a su hijo Rocky. Spoiler: no apto para corazones sensibles.

Kim Kardashian siempre ha sido la imagen más conocida del clan, pero su hermana Kourtney amenaza en los últimos tiempos con superarla. La mayor de las hijas de Kris Jenner se encuentra al fin feliz y satisfecha tras traer a este despiadado mundo a su primer hijo junto a Travis Barker, que se une a los otros tres hijos que tuvo con Scott Disick.

El deseado bebé llegó al mundo el 1 de noviembre de 2023 después de numerosos intentos para quedarse embarazada, un proceso que ha amenazado –y no es para menos- con dejarla fuera de órbita, como se verá.

Han pasado seis meses desde el feliz suceso y la madre ha tenido a bien someterse a un interrogatorio de sus seguidores, uno de los recursos clásicos de toda influencer que se precie para generar contenido jugoso sin demasiado esfuerzo. Y más cuando el tema central es un embarazo.

Y, claro, los fans querían saber cómo había conseguido la abnegada Kourtney reunir fuerzas para seguir adelante con un proceso tan devastador como el que había seguido. Fue entonces cuando la madre se vino arriba y dio pelos y señales del camino hacia el alumbramiento de Rocky.

«Dejé de intentarlo después de un año (5 ciclos fallidos de FIV, 3 recuperaciones)», ha empezado. Efectivamente: tuvo que someterse a cinco fecundaciones in vitro, con todos los cambios y problemas que ello supone, tanto físicos como mentales, por cortesía de las hormonas.

Pero llegó un punto en el que su siliconado cuerpo no pudo más y decidió ponerse en manos de la divinidad, de lo que llamó «el plan de Dios» para su vida. «Muchas oraciones para que viniera lo que fuese para nosotros. También he optimizado mucho mi salud», ha continuado relatando. Y voilà: tras «relajar» su cuerpo, el bebé llegó de forma natural.

«Quedé embarazada 100% naturalmente, NO a través de la FIV», ha expresado. Pero la cosa no puede quedar ahí dentro de un clan como el de las Kardashian, tan propenso a dar siempre un último golpe de efecto. ¿Y cuándo se plantó la semilla del futuro vástago? Kourtney lo aclara: «El Día de San Valentín».

En todo este espinoso camino, Kourtney hizo de todo, según reveló en el episodio del jueves de 'The Kardashians'. Incluso se puso en manos de un médico –cuya identidad permanece en el anonimato, no se sabe por qué- que le recetó el remedio milagroso para soportar mejor su embarazo: beber el semen de su marido, Travis Barker, cuatro veces por semana. Al hacerlo, supuestamente «mejoraría» sus niveles de tiroides. «Me encanta este médico», diría con satisfacción el sacrificado Barker.

Y si fue difícil llegar a quedarse embarazada, y por el bien de su salud y la del pequeño, Kourtney Kardashian también tendría que someterse a una «cirugía fetal urgente», una intervención obstétrica de emergencia para que Rocky pudiese llegar al mundo sin complicaciones.

Hubo final feliz. Ahora, tras ingestas masivas de semen, varias FIV, una cirugía urgente y Dios sabe qué más, el pequeño Rocky es la nueva adición a un clan que, aunque cueste creerlo, siempre encuentra cosas alucinantes que contar para mantener distraída a su masiva audiencia. Así es el mundo de las Kardashians, donde el más difícil todavía es casi una cuestión rutinaria.