El dinero que está en juego tras el divorcio de Sofía Vergara y Joe Manganiello: su acuerdo prenupcial

A principios de esta semana Sofía Vergara (51 años) y Joe Manganiello (46) confirmaron el fin de su matrimonio tras siete años de amor. «Hemos tomado la difícil decisión de divorciarnos. Como dos personas que se aman y se preocupan mucho, pedimos amablemente que se respete nuestra privacidad en este momento mientras navegamos por esta nueva fase de nuestras vidas», declararon a la revista estadounidense 'Page Six'.

Una separación aparentemente amistosa que habrá que ver si al final se resquebraja después de repartirse los 100 millones de dólares que posee el matrimonio gracias al acuerdo prenupcial que firmaron para supuestamente proteger sus finanzas y que, tal y como indica el escrito, en caso de ruptura se repartirían los bienes en caso de divorcio.

Así lo confirmó la propia Vergara el pasado mes de mayo durante el programa 'The Howard Stern Show' en el que confesó que su entonces marido le dijo: «Haz lo que quieras. Firmaré lo que quieras». «Ella se queda con lo que tiene y lo que gana, y él se queda con lo que tiene y lo que ha ganado. Entonces, con un acuerdo prenupcial, y sin hijos juntos, se convierte en un caso mucho más simple», ha explicado ahora el abogado de divorcios Frederic J. Siegel al medio anteriormente citado. Aunque lo que todavía está en juego son los bienes conyugales entre los que se encuentran la casa en Beverly Hills que compraron en 2015. Un inmueble que, tal y como ha confirmado el medio 'TMZ' compró la actriz en exclusiva, por lo que quedaría fuera de los bienes compartidos.

Por lo que se sabe hasta la fecha, la actriz posee un patrimonio neto de 180 millones de dólares, mientras que el de él es un poco más modesto con 40 millones de dólares. «Por lo general, cuando las personas hacen el anuncio como lo hicieron, ya han hecho parte del trabajo preliminar» por lo que el acuerdo de divorcio «probablemente se encuentren en una etapa más avanzada de lo que la gente se cree». «Creo que tanto Vergara como Manganiello reconocen el hecho de que si se trata de un mal divorcio, sus carreras pueden correr peligro, realmente no le sirve a nadie. Tienen muy buenas carreras. No quieren ventilar sus trapos sucios en público», añadió el letrado.