La defensa de Daniel Sancho, sin tiempo para presentar el recurso de apelación, juega otra carta de su estrategia

Condenado a cadena perpetua por el asesinato y desmembramiento del cirujano Edwin Arrieta perpetrado en agosto del año pasado, el destino en prisión de Daniel Sancho se complicaba con el traslado a otro centro penitenciario más duro con los presos y el entorpecido trabajo de su defensa que sigue pugnando por reducirle la pena al chef. Después de meses sin novedades, pues las turbulentas aguas del caso eran por última vez sacudidas con la lectura de la sentencia del tribunal y el seguimiento de la vida en la cárcel tailandesa de Sancho, los abogados del preso han dado un importante paso en la defensa a poco tiempo de que el final definitivo del chef se escriba.

Tras la lectura de la sentencia, en los planes de los abogados de Sancho entraba presentar ante la Justicia un recurso de apelación para cuestionar la decisión del juez tailandés, que Sancho actuó con premeditación en el asesinato al cirujano y además ocultó y destruyó pruebas entre las que se encontraba la documentación del colombiano. Esta actuación conllevaba una sentencia clara, la condena a cadena perpetua que la defensa del chef tomó como victoria al no haber sido condenado a pena de muerte. Así, y considerando que en la decisión judicial cabe la posibilidad de demostrar que el cocinero actuó en defensa propia, los abogados y el propio Rodolfo Sancho iniciaron el proceso de recurrir.

Irreversible la condena para muchos, para la defensa apelarla era también un «milagro judicial» para el que reunir pruebas tenía una fecha fijada. A contrarreloj, el equipo de Marcos García-Montes, en el que destacan también Carmen Balfagón como portavoz de la familia, ya consideró la necesidad de aplazar la fecha establecida en un principio en octubre por falta de tiempo para presentar una documentación suficiente para probar la falta de intencionalidad en la actuación de Daniel Sancho. Su misión, cuestionar la premisa de premeditación con la dificultad de que las numerosas pruebas que presentó la fiscalía dificultaban cualquier otra consideración.

La cuenta atrás llegaba en octubre y la defensa necesitaba más días para preparar el recurso más meticuloso que podían presentar, buscando, sobre todo, resquicios legales en el juicio al chef. Así, solicitaban una prórroga fijada este 29 de noviembre por la Justicia como última posibilidad de recurrir la sentencia. Pero por mucha prisa que hayan querido darse, la defensa tampoco habría llegado a estar preparada en esta cita y ante la falta de avances relevantes que puedan revertir la situación del preso, la fecha sería aplazada de nuevo en solicitud de la defensa que se enfrenta a un escenario cuanto menos complicado para la estrategia.

Según informa EFE, la defensa ha solicitado un nuevo aplazamiento para presentar el recurso del fallo hasta el 29 de diciembre. «El equipo legal sigue trabajando en el recurso», ha asegurado Chippirrás, quien también ha señalado que la apelación se está preparando desde Tailandia, pues será ante los tribunales del país donde debe presentarse. «Esperamos poder tenerlo (el recurso) para el final de esta nueva prórroga, el 29 de diciembre, sin descartar que haya que pedir una nueva», ha declarado el criminólogo. Tal y como confirman desde el tribunal, el límite de aplazamientos posibles a tener en cuenta es solo fijado por el juez y no hay un máximo. La defensa del español ya los ha solicitado en varias ocasiones y ante la incertidumbre del destino en prisión del joven el tiempo corre cada vez más en contra de la defensa por lo que la posibilidad de que el caso sea revisado favorablemente es escasa, más teniendo en cuenta la severidad de la Justicia tailandesa en este tipo de casos.