Christina Rapado y la 'tarde loca' con Camilín: lo que hay detrás de su vídeo bailando y su escopetada salida

El vídeo de la fiesta que se montaron Camilo Blanes, con peluca y sin dientes, y su exnovia, Christina Rapado, ha provocado una cascada de críticas y el grito de auxilio de Lourdes Ornelas, la madre del hijo de Camilo Sesto, desesperada ante la situación. Christina ha explicado en 'Fiesta' qué pasó realmente antes de que lo grabaran y lo colgaran sus 'stories'.

Este sábado alrededor de las tres de la tarde, Camilín la llamó para invitarla a su casa. Cuando ella le preguntó si se encontraba bien, él ya dio pistas de lo que estaba pasando: «Llevo dos días sin dormir». Al parecer, también llevaba dos días sin ducharse. «Cuando vi lo que tenía sobre la mesa de cristal, ya sabía lo que había. Lo recogí todo». «Hay que llamar para pedir más», le comentó Camilín a su ex, que argumenta que su intención era «entretenerle y que no tomara golosinas, quería agotarle para que pudiera dormir».

Las cámaras captaron a la cantante entrando en la casa con una bolsa en la que portaba una caja de cervezas: «Pero eran para mí, porque a él no le gusta. No bebió alcohol en toda la tarde. Estuvimos riendo, saltando, haciendo las cabras por la terraza. Al ver cómo tenía los pies, le dije que nos ducháramos, lo hicimos y nos quedamos desnudos, jugando, escuchando música. Se lo quería pasar bien porque él nunca sale de casa. Lo único que hace es comprar cosas por internet. Ahora le ha dado por las pelucas fluorescentes».

Según ella, la fiesta estaba bajo control: «Porque yo le prohíbo tomar golosinas. Pero, claro, luego viene la chupipandi…». Se refiere a otras compañías que prefieren una diversión más potente y más peligrosa para la salud de Camilín, que muestra un evidente deterioro físico.

A Christina la echó de casa Lourdes Ornelas a las 23.10: «O te vas o llamo a la policía», la amenazó. La 'chupipandi' había llegado diez minutos antes, así que también se fueron, dejando a la madre manejando la situación en casa de su hijo. Christina tiene un mensaje para Lourdes: «Sé que no soy santo de su devoción y no pretendo ser su amigo, le pido que al menos seamos aliadas porque se trata de tener el control sobre él para que pueda estar tranquila».