VIERNES DELUXE
Ágatha Ruiz de la Prada saca la artillería pesada contra Carmen Lomana: «Es una petarda»
El 'Deluxe' revela los mensajes que muestran el 'lado oscuro' de la 'socialité' con la diseñadora
Ágatha Ruiz de la Prada: «El poder tiene erótica, pero ahora sin él, estoy muy divertida»
Las memorias de Ágatha Ruiz de la Prada son «una barbaridad»
![Carmen Lomana y Ágatha Ruíz de la Prada](https://s3.abcstatics.com/abc/www/multimedia/gente/2023/02/25/carmen-lomana-agatha-U502353330122C0C-1200x840@abc.jpg)
«Yo a Carmen Lomana no le he dicho nada, hasta ahora», sentencia en el 'Deluxe' una combativa y nerviosa Ágatha Ruiz de la Prada: «He callado, he aguantado, pero ya». Se suponía que ambas tenían una cita en el programa «para hacer las paces, pero me ha dejado tirada».
Así que, ya puestos, la diseñadora ha puesto las cartas sobre la mesa y, de paso, los 'whatsapps' y audios que revelan la verdadera cara de Carmen Lomana. «Me parece una petarda. ¿En qué trabaja? ¿Para qué sirve? Va muy bien vestida, pero es muy mala», se ha despachado Ágatha, que ha presentado las pruebas que corroboran que Carmen tiene un 'lado oscuro'.
El programa ha ayudado un poco mostrando imágenes inéditas grabadas durante los preparativos del último polígrafo de la 'celebrity', hace tres semanas, en la que no se cortaba un pelo hablando de su 'amiga': «Es una engreída. Vive enferma de envidia, incluso de su propia hija (…) Se cree que está por encima de todos porque una heredado un título que se lo ha quitado a su hermano (…) Su matrimonio era una relación abierta».
Estas son algunas de las perlas que va diciendo 'en privado', aunque Ágatha ha mostrado el interés que Carmen tenía para hacerse amiga suya, bombardeándola con mensajes incesantes e invitaciones a fiestas y eventos. Pero la cosa se vuelve más divertida si hablamos de la hipocresía que sale ahora a relucir: por un lado, Carmen le manda mensajes cuestionando la relación de Ágatha con Luismi ('El chatarrero'), «Tiene fama de golfo», le hace saber antes de ponerse más dura: «Enséñale modales, porque se porta como un gañán. ¿Cómo te has podido liar con un tipo que no tiene conversación? Este tipo en mi casa no entra».
Pero todo cambia cuando llega la exclusiva gala contra el cáncer en la que Luismi tiene una mesa. «Yo no voy a pagar 500 euros», suelta la poco solidaria Carmen, más preocupada en conseguir cubierto gratis que de mantenerse fiel a su versión: «Me parece un tipo muy auténtico, pregúntale si nos invita». Que la invite, dice. El gañán convertido en interesante: lo que hacen 500 euros, oiga. «Si no me llamó 50 veces no me llamó ninguna», recuerda la diseñadora para recalcar la insistencia de su examiga: «Se colaba en mis fiestas de los jueves porque iba a pescar (pareja)». Desde casa, Lomana ha ido mandando mensajes cargados de rencor: «Tu imaginación no tiene límites, como tu maldad». La guerra no ha hecho más que empezar, nos vamos a divertir.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete