¡Yolanda!, con marcas de biquini en la alfombra roja no, por favor
La vicepresidenta segunda del Gobierno siempre nos sorprende con sus palabras, ahora de honor, desde el punto de vista de estilo, y no para bien
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El fundido en negro de los Premio Talía ha ido de mal en peor. Primero posa en el photocall Noelia Bonilla, que he tenido que buscar quién era y descubrir que, por supuesto, es creadora de contenido. Sin embargo, el traje que luce, firmado por Silvia Fernández, me recuerda al instante a un diseño mix terrible entre una bata de cola recién llegada de la Feria de Abril y el famoso vestido de Rita Hayworth con guantes largos incluidos. Algo así como una Gilda flamenca.
Acto seguido, Vicky Luengo, la prota de la serie 'Reina Roja', que gasta tipazo y estilo, esta vez da un poco de grima, porque justo luce tableta rara al caerle en un sitio difícil el corte de su vestido 'cut out' (con cortes y separaciones de tejido). El efecto no make up (como si fuese con la cara lavada), las pestañas tipo patas de araña y ese labial color barro completan un look de lo más desfavorecido.
Pensaba que el color blanquecino de la actriz se debía a que no había tomado el sol, ni puesto autobronceador, pero me he dado cuenta por Hiba Abouck que debe ser el maquillaje oficial de la gala el culpable del aspecto folio de la intérprete. La iluminación del photocall tampoco ayuda y así en vez de tener un aspecto natural, como de recién levantada, las actrices citadas, que cada una en su estilo son guapas y talentosas, parecen algo enfermas, como si no hubieran salido a la calle en meses. Tipo novias de Drácula.
En cambio, la vicepresidenta segunda del Gobierno de España sabemos que se ha dado un buen baño de sol o dos. Luce orgullosa unas tremendas marcas de biquini en su vestido de estilo minimal. Mira Yolanda, no vistas un palabra de honor si se te ha olvidado bajar los tirantes. No es sensual, es chabacano y sólo se permite con un modelo playero y en una noche de vacaciones al borde del mar. Tampoco luzcas esa largura midi, típica de eventos de mañana y de cóctel. ¿Por qué no vistes un traje de chaqueta como el de Emily Blunt? Te pega mucho más.
La líder de Sumar parece que se da cuenta del error y se esconde como puede tras la falda voluminosa del modelo, también negro, de Cayetana Guillén-Cuervo. El diseño de la actriz y periodista, estilo princesa neoyorquina del 'Upper East Side' (barrio pijo de Nueva York), como recién salido del vestuario de 'Gossip Girl', lo firma De La Cierva y Nicolás. La cara nos confirma, pese a su magnífica sonrisa, que es la luz y el maquillaje los que desfavorecen también a las actrices de 'El príncipe' y 'Reina Roja'.
Aitana Sánchez Gijón, que renunció al labial color 'barro del desierto' y lo sustituyó por el clásico rojo que nunca falla. Bravo por ella y por su vestido, que está muy en tendencia, por aquello de las lentejuelas y transparencias. Yo le hubiera quitado tanta lista de brillos porque parece un paso de cebra glamuroso. Pero está estupenda y así muestra al respetable cómo se mantiene -imagino que cerrando el pico y mucho ejercicio- tan guapa y lozana pasados los años.
Hasta Ryan Gosling está algo desvaído y grisáceo en la presentación de su última película. Él que siempre tiene tanto estilo y que atesora trajes de chaqueta imaginativos y molones, como aquel estilo pijama que lució en los Globos de oro, se viste ahora monocolor y en tono hormigón. Una camisa blanca hubiera arreglado el efecto, porque el recurso de vestir todas las prendas del mismo tono, esta vez no ha funcionado por muy tendencia que sea.
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