Sánchez insta al PP a llegar a acuerdos en la cumbre de presidentes después de intentar descafeinarla

Buruaga, que tirando de la analogía navideña ha recordado que en estas fechas se reúnen bajo la misma mesa personas que «sienten», «piensan» y «votan» diferente, ha pedido que de la cumbre se salga con acuerdos para los problemas de los ciudadanos, ya que los españoles, ha asegurado en un claro dardo velado a Sánchez, «no entienden la España de los muros». A continuación, y en una comparecencia por parte de ambos de gran cordialidad y tono institucional, el jefe del Ejecutivo se ha felicitado por el veinte aniversario que se cumple de la primera conferencia de presidentes, que a su juicio representa «el acierto absoluto» que fue la creación a través del título octavo de la Constitución del Estado autonómico. Un modelo de descentralización política y administrativa que, según ha remarcado, ha garantizado solidaridad, desarrollo económico e, incluso, «eficiencia» a la hora de dar respuesta a diversas crisis, entre las que ha citado la pandemia y la reciente DANA, que se cobró más de doscientos muertos en Valencia.

Sánchez se ha fijado cuatro materias principales en las que alcanzar acuerdos: sanidad, financiación, migración -«un reto nuevo que nos compete a todos», ha dicho- y vivienda. En la representación del Gobierno central que asiste a la cita, además de la vicepresidenta primera María Jesús Montero y el titular de Política Territorial, Ángel Víctor Torres, figura precisamente la ministra de Vivienda, Isabel Rodríguez.

Sánchez ha citado expresamente en varias ocasiones a Pradales, haciendo un distingo con sus homólogos, así como a los presidentes de Ceuta y Melilla y a la presidenta de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), María José García Pelayo.

Pese a sus buenas palabras, la conferencia de presidentes arranca con pocos visos de acuerdo y con gran enfado de la mayoría de presidentes autonómicos por la falta de comunicación y de concreción del Gobierno en la preparación de la cita. Una queja que ha sintetizado a su llegada al Palacio de la Magdalena el canario Clavijo, quien ha lamentado que «en la preparación de esta conferencia no haya habido las comisiones preparatorias oportunas y que vengamos sin ningún tipo de documento. Ojalá que me equivoque pero creo que es una oportunidad perdida», ha asegurado. Clavijo ha ensalzado el acuerdo bilateral sobre inmigración que ha alcanzado con el País Vasco, y que se someterá a la consideración del plenario de la presidencia. Fuentes del Gobierno admiten lo difícil de salir del encuentro con un acuerdo, aunque confían en alcanzarlo al menos en inmigración.

Justo tras iniciarse la reunión, con el Gobierno central y los responsables autonómicos sentados en una gran mesa en forma de U, el Ejecutivo ha trasladado a los medios sus planteamientos de partida para la cumbre. El primero, el anuncio de una inversión de 223 millones de euros en los primeros meses de 2025 para el desarrollo de nuevas soluciones sanitarias basadas en Inteligencia Artificial (IA), así como la ampliación de nuevas plazas para profesiones sanitarias en las universidades públicas, «siempre y cuando exista un compromiso firme de las comunidades autónomas para contribuir de forma sostenida a su cofinanciación».

En materia de financiación autonómica, el Gobierno anuncia la convocatoria, también para principios del año que viene, de una reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera con el objetivo de «impulsar la asunción por el Estado de parte del endeudamiento de las comunidades del régimen común», es decir: de todas menos el País Vasco y Navarra, que gonzan ambas de regímenes fiscales propios contemplados en la Constitución.

Por otra parte, les piden una reprogramación de los fondos europeos de cohesión para ofrecer una línea adicional de ayuda a los territorios afectados por la DANA. Y de manera muy genérica, el Gobierno llama a las comunidades autónomas a alcanzar un nuevo modelo de financiación autonómica (su renovación está pendiente desde hace una década) en el que se «concilie la multilateralidad y la bilateralidad» y se «blinde la solidaridad entre territorios».

Sobre las citadas materias de inmigración y vivienda también ha comunicado propuestas el Ejecutivo. En primer lugar sobre el reparto de los menores inmigrantes no acompañados, para el que piden «acordar de una vez una solución compartida al problema», que apele «a la solidaridad de todas las comunidades autónomas». Los seis mil menores que permanecen en Canarias siguen sin ser distribudios por el resto del territorio nacional, agravando una crisis que, por ejemplo, ya provocó la ruptura de los gobiernos de coalición entre el PP y Vox, formación que ya no tiene poder a nivel autonómico y que se opone a ese reparto.

El Gobierno insta también al PP a impulsar de manera conjunta una reforma de la ley del suelo, que precisamente el Gobierno retiró la pasada primavera ante la falta de acuerdo con sus socios parlamentarios y también con el primer partido de la oposición. El Ejecutivo propone igualmente a las regiones blindar el «carácter público y social de las viviendas financiadas con recursos públicos de forma permanente e irreversible». Todo ello con el objetivo de alcanzar un parque público de vivienda que llegue al 20% de toda la vivienda, en línea con lo que ocurre en muchos países europeos.

La conferencia de presidentes no se celebraba desde la que tuvo lugar en 2022 en la isla de La Palma. En 2023, el Gobierno de Sánchez incumplió el compromiso de celebrarla al menos una vez al año.