La red rusa que investiga el FBI usa la crisis migratoria para avivar el populismo en España

No sólo busca esta red aprovechar la llegada de inmigrantes subsaharianas desde Marruecos y a Canarias, sino también de personas latinoamericanas. En su argumentario, esa empresa, que opera con fondos estatales rusos, hace referencia también a la llegada de venezolanos y colombianos que «disfrutan de viajes sin visado a España y solicitan asilo al llegar al reino». También distribuyó mensajes en aplicaciones de mensajería en que afirmaba que los refugiados ucranianos están robando empleo a los europeos.

Conforme a esta estrategia, entre las imágenes elaboradas por esa red para popularizarlas en internet figuran gráficos que alertan sobre una presión migratoria imposible para Europa. Hay caricaturas que reflejan un continente quebrado ante los pies de un ejército de personas con turbante y cimitarra; otra muestra la bandera de Europa con una media luna en el centro. Mensajes antisemitas se mezclan con otros islamófobos y homófobos, además de antiamericanos y antiucranianos. En general, la estrategia es reflejar en redes sociales y cadenas de mensajes una Europa, también España, en llamas, consumida por la crisis y por tanto imprudente en su decisión de enviar ayuda económica y militar para la defensa de Ucrania.

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David Alandete | corresponsal en washington

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Esta campaña es parte de un programa de desinformación rusa que se llama Doppelgänger. Desde hace dos años lo investiga la Fiscalía estadounidense y, de las pesquisas del FBI -que hace las veces de Policía Judicial en EE.UU-, han surgido ya varias sanciones e imputaciones. Unos de los sancionados es un tal Ilya Gambashidze, un ruso que dirige la Agencia de Diseño Social, una consultora privada de comunicación que ha elaborado los materiales de los que informa este diario.

Estos documentos son comunicaciones internas, documentos de estrategia, presentaciones y seguimiento de esa gran operación de injerencia en Europa. Los empleados de la Agencia de Diseño Social, con dinero estatal ruso, creaban mensajes de texto y memes (imágenes virales) para plantarlos en redes sociales y cadenas de mensajes y fomentar el descontento. Para ello también pagaban en plataformas como Facebook para aumentar la audiencia de sus publicaciones, según figura en dichos documentos. Estos son parte de la instrucción del FBI y fueron revelados por los medios 'Süddeutsche Zeitung' y 'Delfi Estonia' bajo el título 'La fábrica de fakes'.

España figura entre los objetivos de esta campaña, pero a diferencia de otros países como Alemania, Francia o Italia, no hay ataques directos al Gobierno. Sí se contemplan críticas a la jefatura del Estado (el Rey Felipe) y al centro derecha (el Partido Popular). Una de las razones que figura en otro documento de estrategia es la necesidad de favorecer a fuerzas conservadoras a la derecha del PP para debilitar al que es el partido mayoritario en Europa y principal aliado de Ucrania.

Un argumentario interno de esta fábrica de bulos recoge los lemas a repetir, con las fuerzas políticas que se benefician de ellos. Figura el partido ultra Alternativa por Alemania, así como el FPÖ austriaco, que acaba de ganar las elecciones legislativas en ese país. También el Frente Nacional francés y Vox. A este último partido no hay tantas referencias como a las demás fuerzas hermanas en Europa, pero sí se recomienda tomar eslóganes suyos, sobre todo 'hagamos España grande otra vez', para favorecerle y presentar a los populares como una fuerza debilitada y carente de identidad.

Un mensaje que fue difundido en varias redes en inglés, alemán, francés, italiano y español muestra un gráfico tomado de un diario británico con las cifras de mayor inmigración musulmana en Europa. Alemania y Francia están en la cima, con más de 4,7 millones de inmigrantes cada uno, y España también se incluye con casi un millón. Ese gráfico se difundió en Facebook, Twitter, WhatsApp y Telegram con mensajes que alertaban de la inminente islamización de todo el continente.

La campaña es muy sofisticada. Se identifican los asuntos más populares en redes sociales por países y se estudian tendencias por regiones. Las cifras que se manejan sobre inmigración, asilo o subsidios son reales, extraídas de informes oficiales, pero se mezclan con anécdotas falsas o conclusiones inexactas. Por ejemplo: las élites de Bruselas comandadas por la Comisión Europea estarían ejecutando un plan de reemplazo de la población de la UE por minorías étnicas para crear unos Estados Unidos de Europa dictatoriales controlados por el PP con el apoyo financiero del magnate George Soros.

Hay inclusos estudios sobre qué redes sociales y aplicaciones de mensajería son más populares en cada mercado, para distribuir en ellas los mensajes con perfiles falsos. En España y otros países europeos se recomienda WhatsApp, Facebook y YouTube. La portavoz del PP en la Eurocámara, Dolors Montserrat, presentó este lunes una pregunta a la Comisión Europea para que explique qué medidas ha tomado frente a este problema.