El PP pide disolver los grupos de Junts y ERC: «Lo que está pasando es muy grave, una manipulación de manual»
Los populares consideran un fraude de ley el préstamo de escaños y votos a los independentistas catalanes y piden que se les integre en el Grupo Mixto
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El Partido Popular (PP) no va a dejar pasar la oportunidad de plantar batalla a la concesión que hizo la Mesa del Congreso a Junts y ERC, a los que concedió la creación de grupo parlamentario propio a pesar de no cumplir ... con los requisitos necesarios para ello. Ambas formaciones tuvieron que recibir el 'refuerzo' de varios diputados de Sumar y PSOE, que en solo unos días pidieron su vuelta a sus grupos de origen, pero no solo eso. También tuvieron que sumar sus votos, algo que no tiene precedentes. Un viaje exprés de ida y vuelta que para el PP invalidaría la creación de estos grupos propios, por lo que ha pedido de manera oficial a la presidenta del Congreso que los elimine y envíe a los independentistas al Grupo Mixto.
Así lo ha hecho en sendos escritos remitidos a la Mesa, a los que ha tenido acceso ABC, en los que pide a Francina Armengol que reconsidere la formación de los grupos de Junts y ERC. La 'fuga' de los diputados de Sumar y el PSOE, cedidos para que la Mesa pudiera interpretar que los catalanes cumplían con los requisitos para tener grupo propio, ha hecho reaccionar a los populares, minoría en la Mesa, que no descartan llegar hasta donde haga falta para denunciar este «fraude de ley».
«Es una manipulación de manual. Un fraude de ley que no tiene precedentes. Porque no se entiende que se presten unos diputados y que estos vayan con sus votos. Los votos no son de los políticos, son de los partidos y de los ciudadanos que los votaron. No puede ser que un señor de Girona que votó al PSOE de repente su voto no sea para el PSOE sino para Junts», explican fuentes del PP.
Según el Reglamento del Congreso, para que formar grupo propio, se debe reunir no menos de quince diputados o al menos cinco, siempre que se haya obtenido el 15 por ciento de los votos en las circunscripciones en las que se hayan presentado o el 5 por ciento en España. Tanto a Junts como a ERC les faltaban requisitos para obtener grupo, pero los movimientos internos con Sumar y el PSOE y la interpretación de la Mesa les otorgó este privilegio.
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En el PP no descartan ir «hasta el final» con este tema, que consideran «muy grave». Pues no solo se trata de un asunto económico y de visibilidad -tener grupo propio aporta unos 30.000 euros de financiación mensual y permite intervenciones más largas en el hemiciclo-, sería sentar un precedente de complicado encaje para el futuro.
El recurso del PP se une al que hizo Vox, en el mismo sentido, al que los de Abascal unieron otro en el que exigían la retirada del sueldo y los móviles de los diputados que prometieron su cargo en lenguas cooficiales.
La pelota está ahora en el tejado de Armengol, que debe decidir -ella y el resto de la Mesa donde el PSOE y Sumar son mayoríoa- si revierte la decisión tomada o la mantiene, lo que provocaría que el PP eleve su recurso a otras instancias buscando la disolución de los grupos que considera fraudulenta.
Será la Junta de Portavoces de la próxima semana la que discuta este asunto, algo que se hará en dos semanas de manera consecutiva. La primera, la del jueves que viene, será a colación del recurso presentado por Vox; la segunda, por el que recientemente ha presentado el PP.
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