Un portavoz del Ejército israelí: «Críticas como las del presidente español hacen el juego a Hamás»

«Hamás busca una crisis humanitaria para que la comunidad internacional presione a Israel y que tengamos que dejar de desmantelar la infraestructura del grupo terrorista», afirma. Defiende que criticar las operaciones de Israel incentiva a los terroristas «para que sigan utilizando a civiles para sus objetivos militares». Además, sobre la petición que ha hecho Pedro Sánchez este viernes acerca de un alto al fuego permanente, Kaplan contesta rotundo que «no se trata de un alto al fuego, sino de una pausa operativa». Y añade que, una vez termine, seguirán con su «objetivo de desmantelar Hamás y de rescatar al resto de los secuestrados».

Al ser preguntado por las imágenes de bombardeos sobre la población palestina, que han trascendido en la prensa internacional desde el 7 de octubre, contesta que sólo atacan «objetivos militares» y que hacen «enormes esfuerzos por disminuir la daños a civiles». Pone como ejemplo el hospital de Al Shifa, donde las FDI han centrado sus operaciones en las últimas semanas. Según comenta, el edificio «perdió su inmunidad al ser usado como base de Hamás y entonces se convirtió en un objetivo militar legítimo. Buscamos mostrar al mundo sus infraestructuras y eliminarlas». Equipos de Associated Press y Reuters certificaron esta semana la presencia de túneles bajo el andamiaje del edificio. Las FDI aseguran que allí se ubicaba la base de Hamás. Estos últimos lo niegan.

En relación con las críticas, se pregunta «por qué a Hamás no se le pide que se adhiera al derecho internacional» y pone en solfa las fuentes palestinas a la hora de contabilizar las víctimas. «Cometen todo tipo de crímenes de guerra y nadie lo denuncia», afirma. «Nuestros hijos no pueden vivir bajo la sombra de un grupo terrorista, somos conscientes de las imágenes, pero Hamás se ha esparcido mimetizándose con la población civil. Lamentamos profundamente la muerte de cualquier civil sea gazatí o israelí», puntualiza.

Sin embargo, los reproches a las acciones de Israel no han llegado sólo por parte del presidente, también desde miembros del nuevo Ejecutivo. Sira Rego, ministra de Juventud e Infancia, publicó un tuit el mismo día de los ataques de Hamás, que provocaron la muerte de cerca de 1.200 civiles, donde no los condenaba y acusaba al país hebreo de practicar el «apartheid». Kaplan, midiendo sus palabras al hablar de «temas tan políticos», pregunta de forma general: «¿De qué están hablando? Quiero pensar que es simplemente una cuestión de ignorancia y no de antisemitismo».

Explica que Israel es un país diverso, con musulmanes dentro del propio Ejército y de las instituciones, y que es en la Franja dominada por Hamás donde no pueden vivir los judíos. «Me quedo perplejo de ver como la ultraizquierda justifica acciones violentas de una guerra santa. A veces pretenden ser tan buenos que se dan la mano con las acciones de islamistas radicales», afirma.

Kaplan también contesta a la propuesta que Pedro Sánchez trasladó a Netanyahu y al primer ministro israelí, Isaac Herzog, según la cual debe ser la Autoridad Palestina la que tome el control sobre la Franja de Gaza una vez terminen las operaciones militares en la región: «Uno de los problemas más graves es la incitación al odio y eso no solo lo hace Hamás, sino también la Autoridad Palestina con el adoctrinamiento en las escuelas. Acaba provocando ataques como los del día 7 de octubre. Somos dos pueblos que debemos vivir en paz sobre una misma tierra, pero para eso necesitamos que la educación no sea esa».