LAPISABIéN
Fríos con memoria
Madrid tiene mala relación con el frío, como las peronistas cuando vino Eva
Sobre un libro de Landero
La memoria del frío en Madrid tiene memoria (sic). De repente, de golpe y porrazo, una inversión térmica, una nevada, un sabañón y una garganta ajada (la mía).
Madrid tiene mala relación con el frío, como cuando Evita Perón llegó con sus ... abrigos, y el todo Madrid, en verano, la recibió con sus abrigos, que nos daban carne, 'leches'. Hace frío para «destetar HDP» que dijo Camilo José Cela en 'La colmena'.
Un frío que es además 'proustiano', principiando sabañones y demás. Eso es lo que hay. Cuando marzo 'enerea', abril 'agostea'. En quince años no he sentido tanto frío. Ni un carajillo de los de Ábalos, de los 'mañanareos', me calienta.
Quizás esté frío tan tarde venga a recordarle a Sánchez, que no somos el Caribe, y que el general está en su laberinto. El general Sánchez cabalgando contradicciones. Otro que se calienta.
Hay más. La fiebre hace que se vean mejor las cosas. Como Madrid. En una ventana meteorólogica, anduve como un poeta barato buscando la nieve.
La vi al día siguiente, en un parche cerca del Templo de Debod. Y este frío durará poco, pero nos reconcilia con lo que fuimos.
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En Madrid nevaba y en Valencia, 20 grados con lluvia. Eso pasó y eso, y no más, es la España plural. La que va de Ábalos a Koldo y pasa por Zamora, donde Doña Urraca.
He hablado del frío. Pasado mañana, quizá, la primavera asome por la esquina sureña de Cenicientos.
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