Un corto de cine para reinterpretar la vida de pueblo en la era digital
Las vivencias de las personas mayores son recreadas por jóvenes de entre 18 y 30 años en Collado Mediano
![Los jóvenes aprendiendo los bailes de la época con Carmen Abad (a la derecha de la imagen)](https://s2.abcstatics.com/abc/www/multimedia/espana/2024/08/16/cortos1-RTIER080T3WwKEvcAdnmsFI-1200x840@diario_abc.jpg)
Carmen Abad llegó en 1966, con 12 años, a la localidad madrileña de Collado Mediano. «Yo me consideró de Collado, por el cariño que recibí y el que sigo recibiendo a día de hoy. Soy feliz aquí». Su vida se ha desarrollado en este pequeño municipio ... , de tendencia evolutiva en los últimos años: «Cuando llegué parecía un pueblo sin vida. Era un invierno de los que había antes. Después cogimos vida y conocimos gente». Era gracias a los 'guateques' -las discotecas de hoy en día-, el foco de relación de los jóvenes en su momento. Es esta escena, una de las representadas en el campo de voluntariado 'Mirada compartida: cine entre generaciones', una propuesta de verano para jóvenes de entre 18 y 30 años en la que se realiza una interpretación de cómo las vivencias de aldeanos de 1970 hubieran ocurrido en la actualidad.
Se trata de una iniciativa que crea un espacio de acompañamiento, aprendizaje y solidaridad intergeneracional. La actividad ofrece a estos chicos la oportunidad de aprender contenidos sobre realización audiovisual, desde la preparación del guión y las entrevistas hasta la filmación del material recopilado; y sobre todo, de conocer la historia y ponerse en la piel de las personas mayores. «Esto es una experiencia para empatizar» expone Ana Lizal de Rodríguez, una cántabra de 19 años que participa en este proyecto. «Es un descubrimiento para conocer gente, historias, nuevos lugares y a ti mismo».
Este proyecto «pretende que los mayores hablen de su juventud y de que un grupo de jóvenes de toda España lo reinterprete cómo cree que habría ocurrido hoy en día. El objetivo es que los mayores no culpen a los menores de su contexto digital, sino que es algo que hubiera ocurrido si ellos hubieran nacido 30 años más tarde», expone Santiago Lara, director de este campamento de voluntarios.
La grabación del corto tiene una gran responsabilidad afectiva e histórica, ya que no solo se limitan a la reinterpretación de las vivencias, sino la comprensión de su verdadera historia. «Estamos recogiendo las memorias de mucha gente anciana, que han vivido su juventud en los años 70 y a la que tanto anhelan», explica Miguel Moliner, un oscense de 18 años, encargado de la grabación del corto. «Sabemos que las generaciones han cambiado, pero hasta que no hablas con ellos, no eres consciente de las muchas diferencias y semejanzas que compartimos. Ninguna es mejor que otra. Era evidente que había un cambio, pero, ¿realmente era tan profundo?», expresa Ana, sobre su estrecha relación con las personas mayores.
En este proyecto, para recabar testimonios se ha procedido a realizar un «caza tu abuelo», preguntando a las personas mayores de las localidades cercanas, como Becerril de la Sierra o Moralzarzal, sobre las vivencias en su época de juventud. Para conseguirlo, se han trasladado a centros de día, residencias y piscinas, entre otras.
«Las personas mayores han sido muy receptivas y fáciles a la hora de hablar de cualquier tema. Hay que saber escucharles», explica Esteban Calvo, un jóven segoviano de 18 años, también parte del proyecto. El principal problema al que se han enfrentado es la imposibilidad de conseguir un contacto directo, lo que provoca una poca continuidad en las historias. Esto puede estar muy relacionado al miedo y coacción que sufrían en épocas de antaño al proponer opiniones o contar sus propias experiencias. «Encuentras historias que te hacen viajar al pasado, rememorar a esas personas estos años. Además, se revive el anhelo de los mayores de poder cambiar», expone Eva Gavela, monitora de ocio y tiempo libre, una de las encargadas de los jóvenes.
![La directora del corto, Nedia García, a punto de comenzar una escena](https://s3.abcstatics.com/abc/www/multimedia/espana/2024/08/16/cortos3-U83247777227NpP-760x427@diario_abc.jpg)
Estas charlas tan particulares hacen que se produzca un flujo comunicativo lleno de aprendizaje y de conocimiento, haciendo que las épocas se unan en una sola persona. Ambas generaciones están deseando estar enlazadas. «A partir de ahora, voy a ver esta diferencia generacional más próxima. No somos tan diferentes. Todos tenemos historias, que nos encantaría compartir», explica Esteban, el joven de 18 años.
«A veces vemos a las personas mayores como fotografías»
Nedia García
Directora del corto
Además de conocimientos externos, se produce una autorreflexión. Los jóvenes viven tan rápido, que no son capaces de valorar cada pequeño detalle que hay en los momentos. Esto es uno de los grandes aprendizajes para todos los participantes en el campo de voluntariado. «Yo venía con la idea de aportar lo que sé. Pero no me imaginaba que ellos me iban a enseñar más: me siento sorprendida conmigo misma», explica Nedia García, directora del corto.
«Nos hemos reconocido en sus historias y hemos conectado con ellos, y ellos con nosotros». Este corto persigue que haya un intercambio de experiencias que enriquezca a ambos y que no separen sino que unan. «A veces vemos a las personas mayores cómo una fotografía y no vemos que han sido personas en todas sus versiones».
![Carmen Abad en la barra de la imitación del 'guateque'](https://s3.abcstatics.com/abc/www/multimedia/espana/2024/08/16/cortos2-U80341818481nAg-760x427@diario_abc.jpg)
Pese a esas diferencias generacionales, existe un rayo de esperanza que une a ambas generaciones. Lo único que hace falta es sentarse a conversar y descubrir que las vivencias de antes pasan en la actualidad. Pero son tomadas y analizadas de manera diferente por el contexto. No solo eso. Las personas mayores y los adolescentes tienen muchas cosas en común: las ganas de contar historias y de entenderse. Con esta unión, eliminamos los estereotipos que existen de ambas voces y se ayuda a entender unos contextos tan dispares. «Tenemos muchas más cosas en común de las que pensamos y hay mucho interés, por las dos partes, de conocer», expone la monitora Eva, sobre la ruptura de la línea que separa a las generaciones.
Aunque otro de los causantes de esta lejanía entre épocas es la aparición de las tecnologías. «Las tecnologías han hecho que el romanticismo se haya perdido. Ese amor que sentías se ha convertido en una charla por una pantalla» explica Ana Lizal con tristeza. Los jóvenes aseguran que han aprendido mucho de las personas mayores, sobre todo a valorar la juventud y a considerarlos personas en una etapa que pasarán ellos más tarde: «Yo no soy mayor, soy como tú», es uno de los consejos generales que les aportaron las personas mayores.
Los abuelos son personas con muchas ganas de contar, solo necesitan que se les muestre empatía, interés y motivación. «Algo muy bueno puede salir cuando una persona mayor comienza a divagar. Ya no sirve solo para que quince jóvenes grabemos un corto, sino para que en nuestro día a día también sepamos cuidar a los mayores».
Este proyecto está englobado dentro de la campaña de verano que organizan todos los años desde la dirección general de juventud de la Comunidad de Madrid. «Queremos dar una oferta de actividades para que los jóvenes puedan disfrutar de su verano y, sobre todo, tener la oportunidad de participar en campamentos de voluntariado con todo lo que supone una experiencia enriquecedora en ellos», explica Bibiana Garcimartín, subdirectora general de programas e instalaciones en la dirección general de Juventud. El proyecto se complementa con otras actividades como veladas nocturnas, salidas a las piscinas Berceas y al parque Amazonia, y la proyección de los cortos realizadas en las poblaciones y entidades participantes.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete