El falso mito de que una mayor participación beneficia a la izquierda

La abstención en las elecciones del 4 de mayo ha sido del 24,2 por ciento, 11,5 puntos menos que en los anteriores comicios. La derecha ( PP , Vox y Ciudadanos ), sin embargo, ha recibido el apoyo del 43,2 por ciento del total del censo electoral, 10,8 puntos más que hace dos años. Por el contrario, la mayor participación, histórica en la región, solo ha supuesto que la izquierda haya crecido 0,4 puntos respecto a 2019, hasta el 30,9 por ciento del censo, sumando los votos de Más Madrid , PSOE y Unidas Podemos .

No ha sido cuestión de unos comicios extraordinarios. El lugar común de que la abstención beneficia a la derecha simplemente no se cumple. En los cuatro mayores aumentos de la participación en la Comunidad de Madrid (1995, 2021, mayo de 2003 y 2007), el bloque de la izquierda solo fue mayoría en mayo de 2003, el año del «tamayazo», que terminó con la repetición electoral en noviembre.

La segunda mayor participación histórica en la región, en 1995, también significó el segundo mejor resultado para la derecha, entonces agrupada en el Partido Popular. La abstención fue del 29,6 por ciento, 11,7 puntos menos que cuatro años antes. La derecha recibió el apoyo del 35,8 por ciento del censo, 6,1 puntos más que en 1991. La izquierda también mejoró, pero no lo suficiente para impedir a Alberto Ruiz-Gallardón iniciar la era de dominio de los populares en la Comunidad de Madrid.

En 2007, una vez más, la subida de la participación supuso una mejora de los resultados de la derecha, la segunda legislatura de Esperanza Aguirre. La abstención bajó 4,7 puntos respecto a la repetición de los comicios de 2003. La derecha, agrupada en el PP, creció 5,5 puntos, hasta recoger el 35,7 por ciento del censo electoral. La izquierda, a pesar del aumento de la participación, tuvo incluso menor apoyo que cuatro años atrás.

Los políticos de izquierda justifican el mito de que la abstención beneficia a la derecha porque tradicionalmente la participación es menor en las zonas de rentas más bajas, que consideran sus feudos. Otra afirmación que no se sostiene con los datos.

En Madrid capital, Carabanchel, Villaverde, Usera y Puente de Vallecas, con rentas por debajo de la media, han sido los únicos distritos donde la participación ha estado por debajo del 70 por ciento en las elecciones de 2021. No obstante, esa participación ha sido superior que en 2019, ocho puntos de media más. Y esa subida no se ha traducido en mejores resultados para la izquierda. Al contrario. No solo el PP es el partido más votado en todas ellas, como en el resto de la capital, sino que la suma de los partidos de la izquierda ha retrocedido en todos, hasta quedar incluso por debajo del 50% en el caso de Carabanchel.