Un asalto cada dos días: así saqueaba medio país el clan de los viajeros desde Villaverde
Los tres delincuentes se instalaron en un piso turístico y suman cerca de 200 reseñas. Solo ha entrado uno en prisión

El patrón era básicamente el mismo: robo de un coche de alta gama, carrerón hasta la ciudad elegida y hasta dos golpes al día. Así se llevaron los integrantes del clan de los viajeros desde la última semana de mayo hasta mediados de junio. Que ... se sepa: una treintena de hechos delictivos cometidos por un trío encabezado por Ángel Hernández de la Torre, de 34 años y con 77 reseñas previas por la Policía Nacional, Foral de Navarra y Guardia Civil.
Noticias relacionadas
Conocido como el Bubu, el líder se hacía acompañar por dos sujetos de origen marroquí: uno de 32 años con 68 antecedentes y otro de 25 años con 48 anotaciones, también en la base de datos de la Ertzaintza. La gran mayoría son delitos patrimoniales de toda índole y reclamaciones judiciales, así como por conducción.
Discípulo del Goyito
En total, 192 antecedentes sumaban este clan , cuyo sobrenombre viene por su altísima capacidad de movilidad geográfica (expertos en delincuencia itinerante) y porque se hacían pasar por turistas: se quedaban en viviendas de alquiler de este tipo, hasta el punto de que en la primera quincena de junio se instalaron en una de Torre del Mar, una zona de playa de la localidad de Vélez Málaga.
El Bubu ha trabajado con uno de los mejores conductores de la escena lumpen madrileña, el alunicero conocido como el Goyito , actualmente en prisión tras un acuerdo judicial. La destreza al volante de Ángel Hernández es tan grande como temeraria. Ha protagoniado numerosas persecuciones a más de 200 kilómetros por hora, en esta y anteriores investigaciones, sin dudar en poner en peligro la integridad de los agentes.
El operativo ha sido llevado a cabo por los Mossos d’Esquadra y la Guardia Civil , al conocer cada Cuerpo que el otro seguía la pista a la banda por hechos en distintas demarcaciones. Los policías catalanes bautizaron la operación como Maverick y la Benemérita como Cerbero Tera.
Los primeros tuvieron conocimiento de dos robos en Tarragona, el 25 de mayo, en tiendas de telefonía móvil. Con apenas 15 minutos de diferencia. También se les imputa dos robos de coches y otro contra la seguridad del tráfico: en la AP-7, a la altura de Tortosa y sentido Valencia, un radar móvil de una patrulla de Tráfico de los Mossos los captó a 223 kilómetros por hora mientras circulaban con uno de los coches sustraídos unos días antes en Madrid.
Asalto a una gasolinera
En uno de esos golpes (el otro se quedó en tentativa), el clan de los viajeros se hizo con 80 teléfonos móviles, valorados en alrededor de 15.000 euros. Entre los días 30 y 31, los investigadores tuvieron conocimiento del robo de otro coche de lujo en Parla, con el que los encartados se desplazaron a la provincia de Málaga para seguir dando ‘palos’. Ahí fue cuando un equipo de la Guardia Civil que también andaba tras su pista se puso en contacto con los de Multirreincidencia de los Mossos y se estableció un grupo conjunto de trabajo.
La carrera delictiva del Bubu y los suyos continuó en los días siguientes. Se habían instalado en la zona de Torre del Mar, en la provincia malagueña, y desde allí iban y venían a distintas zonas de Andalucía Oriental.
A 200 km/h
El 11 de junio, sobre las 3 de la madrugada, asaltaron una gasolinera en Linares (Jaén). Tres días después, dos tiendas de telefonía en El Ejido (Almería), donde se saltaron un control policial a 200 kilómetros por hora. El 16 de junio, nuevo robo con violencia e intimidación, en una tienda de Málaga. Tanto le daban a los atracos violentos como a los robos con fuerza en sus distintas modalidades.
El 17 de junio, los investigadores registraron uno de los domicilios de la banda en Madrid. Allí encontraron información relacionada con hechos delictivos, que se está estudiando. Los agentes recuperaron efectos por valor de 56.000 euros, con un total de 127 teléfonos que habían robado de El Ejido y Granada , así como ropa de marca de un centro comercial de Málaga.
Actuaban principalmente en las provincias de Madrid y Málaga, pero también en Burgos, Ávila, Salamanca, Jaén, Granada, País Vasco, Navarra, Melilla, Murcia y Zaragoza.
De los tres encartados, dos están en libertad. El tercero ha entrado en prisión porque tenía reclamaciones judiciales previas. La presión policial en la Comunidad de Madrid está provocando desde hace un par de años que nuestra región ‘exporte’ aluniceros al resto de España. Y esto es precisamente lo que ha ocurrido con este o otros grupos criminales. Bandas asentadas en Villaverde, Usera o Vallecas , por ejemplo, que están actuando de manera reiterada en la zona toledana de La Sagra, pero también en Levante o en la Costa del Sol; sobre todo, en esta época en la que aumenta la actividad comercial en esas zonas.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete