Polémica en un colegio de Badajoz por un taller de caza que incluía trocear un jabalí

Hay veces en que la polémica tiene argumentos de base pero en los tiempos que corren, en que las sensibilidades están tan a flor de piel, es fácil que la controversia se desate con una cuestión de fondo que no siempre merece la pena tanta revuelo. Comentarios desafortunados, cuestiones relacionadas con la identidad de género, las violencias, el lenguaje o el trato con los menores pueden volverse una fuente de polémica.

Algo similar ha ocurrido ahora en Badajoz a costa de la peculiar actividad escolar que se había planeado para este martes en el CEIP Lope de Vega para sus alumnos de 5º y 6º de Primaria y que finalmente quedó suspendida por las discrepancias que generó.

La actividad había sido organizada por la Federación Extremeña de Caza (Fedexcaza) y pretendía promocionar la carne de caza y, como ellos cuentan, dar a conocer los beneficios de «esta carne natural y sostenible» y, por ello, sé proponía a los alumnos trocear un jabalí y un corzo y después cocinar la carne y hacer una degustación.

Para Fedexcaza, la idea era explicar el alto valor proteico y el perfil graso limitado, en comparación con otras carnes del mercado, de estos productos. El plan inicial era que tenían que ser dos horas y media de actividad durante los que iban a explicar el origen, despiece, cocinado y consumo de este tipo de carne, con aportaciones técnicas pero también una demostración práctica hasta la recta final de la actividad, en la que se iban a preparar unas 200 raciones de comida.

Algunos padres y madres, sin embargo, se mostraron reticentes con la iniciativa. Desde la Asociación de Madres y Padres de Alumnos (AMPA) se dejó claro que no veían adecuada la iniciativa, según Efe, y que tampoco había sido lo suficientemente explicada a las familias.

De hecho, al parecer se había hablado de que se realizaría un taller sobre comida saludable, sin especificar que la sesión tendría la carne de caza como protagonista, como otros tantos talleres similares realizados en los últimos meses. La Junta, por su parte, tampoco había autorizado la actividad, que al ser un tanto especial sí requería de un permiso.

«Me parece asqueroso y traumatizante para la mayoría de los niños», comentaba un usuario en Twitter mientras que algunos padres lamentaron que constantemente tienen que ser informados y firmar una autorización cada vez que los escolares participan en otras campañas, pero que en este caso no habían sido informados. Ante el revuelo generado, la dirección del centro anuló la actividad.