A mí no se me va a olvidar
Sin duda, en el Festival de San Sebastián están consiguiendo audiencia y publicidad a costa de las víctimas del terrorismo de ETA
Josu Ternera se está riendo del Estado de derecho y los organizadores del Festival de Cine de San Sebastián están colaborando con el jefe de ETA en la consecución de este fin. El terrorista es perseguido por la Audiencia Nacional en el marco de tres ... causas judiciales, una de ellas nada menos que por el delito de lesa humanidad, el más grave que existe en cualquier ordenamiento jurídico. Sin embargo, en lugar de comparecer ante el alto tribunal, el hombre decide explicar no sé qué argumentos ante las cámaras de Évole y, en medio de su discurso, incluso desliza nada menos que participó en el asesinato del alcalde de Galdácano Víctor Legorburu.
¡Terrible la inacción del Festival de Cine de San Sebastián! ¡Un 'gran aplauso' a los adalides del séptimo 'arte'! Sin duda, están consiguiendo audiencia y publicidad a costa de las víctimas del terrorismo de ETA, las que han dado su vida por que en su tierra se pudiera hoy vivir en paz y sin miedo, las que nunca se han tomaron la justicia por su mano, las que siempre han confiado en ese Estado de derecho ahora ninguneado. Sin duda, estos 'gurús' de la gran pantalla van a lograr más proyección con esta apuesta por una transgresión fake que con su programación habitual. Un recurso fílmico con el que pretende situarse del lado de Hitchcock, pero que en realidad es más propio de cobardes que miran los toros desde la barrera y nunca se han enfrentado a una vaquilla.
Lo último que hemos sabido es que los organizadores del Festival han priorizado esta colaboración con esa finalidad de reírse del Estado de derecho que se ha marcado el terrorista más buscado por encima de cintas premiadas fuera de España, con el documental promovido por Alfonso Guerra sobre la Transición, que fue galardonado en varios países europeos, americanos y asiáticos.
El ninguneo snob, propio de supuestos guías espirituales cuyo criterio se limita a hacer seguidismo a otros 'maestros' de la estafa fílmica regados por las subvenciones de sus verdaderos amos, da cuenta del nivel cinematográfico del Festival, que debe estar por encima del Pacific International Film Festival, el London Film Festival o el Golden Leaf International Film Festival, certámenes todos ellos que sí han distinguido al documental de Manuel Lamarca. Recuerdo que ya se produjo esta ignominia hace 20 años con un documental donde se volvía a blanquear a ETA-Batasuna, 'La pelota vasca', de Julio Medem. La historia se repite 20 años después.
No dudo que el testimonio de Ternera tenga valor. De lo que dudo es de que Évole consiga sacarle esa información valiosa que sirva para avanzar en el terreno judicial, que permita resolver al menos alguno de los 379 asesinatos cometidos por ETA que aún permanecen impunes. Son más del 40% de los crímenes perpetrados por esta aberrante banda terrorista, una proporción que también da cuenta de cómo éstos asesinos se están riendo del Estado de derecho.
A muchos españoles se les puede olvidar que hubo un tiempo no muy lejano en el que ETA mataba a una persona al día, que tenía aterrorizada a la sociedad, que héroes de 20 años recién salidos de la academia de la Guardia Civil caían como moscas y dejaban a padres destrozados y marcados para siempre, que jueces, fiscales y políticos valientes eran masacrados por levantar la voz. A mí, desde luego, que perdí a un padre para siempre, nunca se me olvidará.
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