Mazón, sobre su situación tras la dana: «Hace tiempo que no recibo más que insultos»
El presidente de la Generalitat lamenta la tensión vivida este jueves en las Cortes Valencianas y pide una reflexión de «todos sin excepción»
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El presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, ha asegurado que recibió «gritos, insultos e interrupciones» durante la bronca que se generó este jueves en el pleno de las Cortes Valencianas. «Hace tiempo que no recibo más que insultos, y creo que mantengo la calma porque creo que es mi obligación, pero sobre todo lo que intento es dar cuenta de cómo estamos», ha lamentado.
El líder autonómico ha manifestado este viernes en Alicante que lo vivido en el Parlamento valenciano merece «una llamada a la reflexión de todos» los diputados, «sin ninguna excepción» y, en paralelo, ha querido incidir que «al menos» él merece «el mismo respeto que cualquier otro parlamentario».
Así ha valorado la tensión y los reproches que se iniciaron mientras intervenía Joan Baldoví (Compromís). Cuando este síndic pidió la dimisión de Mazón por su gestión de la dana entre gritos de «dimisión» de sus compañeros, se provocó un murmullo entre la bancada de la derecha. En un momento, el conseller de Educación, José Antonio Rovira, reprochó desde su escaño a la izquierda que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, «se fue por patas» de Paiporta durante la visita con los Reyes a principios de noviembre.
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Seguidamente, Mazón subió a la tribuna para responder a de Baldoví. «Mientras unos estamos trabajando, otros se dedican al circo», lamentó, y recogió el guante de la visita a Paiporta: «Yo me quedé con el rey y otros no». Esto ocasionó quejas del PSPV y de su síndic, José Muñoz, quien se levantó de su escaño, tras lo que la presidenta de las Cortes, Llanos Massó, le llamó al orden mientras discutían Rovira e Isaura Navarro (Compromís).
Cuestionado por esta bronca y por la actuación de Rovira, Mazón ha subrayado que quien «intentaba hablar» era él -refiriéndose a sí mismo- porque «estaba en el uso de la palabra» y recibió, ha denunciado, «gritos, insultos e interrupciones»: «Al que no se le dejó hablar fue a mí, al que se le insultó repetidamente fue a mí».
Al respecto, ha evidenciado su «preocupación por la imagen que se estaba dando», cuando ha reivindicado que «el parlamento es el lugar de la palabra, no de los gritos, ni de los insultos, ni de los golpes en la mesa, ni de los circos». Ante esta situación, ha propuesto que «todos hagan una reflexión sobre el momento que realmente estamos viviendo», en alusión a la dana, y sobre «la capacidad de reacción de la Generalitat». «Poder dar cuenta de ello en las Cortes Valencianas debería ser algo normal, y desgraciadamente ayer no lo fue», se ha quejado.
«Esto lo quiero convertir en una llamada a la reflexión de todos, sin ninguna excepción», ha insistido, para «recordar que quien estaba en el turno de palabra» era él mientras «se levantaron a insultar y se dieron golpes en las mesas». Preguntado por si escenas como la vivida en la Cámara generan desafección política, Mazón ha señalado que «sin duda genera desapego entre la ciudadanía». «Cuando un representante de los ciudadanos está en el uso de la palabra, lo mínimo es escuchar lo que tenga que decir y, si alguien discrepa, que responda en su uso de la palabra», ha abundado.
Lo que intentaba, según ha argumentado, era explicar la acción de la Generalitat frente a la dana para que los valencianos sepan «cómo estamos en Navidad, 50 días después». «El 100% de los alumnos han vuelto a clase, el 100% de los centros de salud están abiertos, 18 de 18 carreteras de la Generalitat se han recuperado, hemos movilizado más de mil millones y hemos abonado más de 14.000 ayudas a familias mientras el Gobierno no llega a 900», ha reiterado, para indicar que «aún queda mucho por hacer».
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