«Todos llevaban un alto tren de vida»: detenidos ocho traficantes armados en Alicante con 50 kilos de marihuana y 100.000 euros
La Policía Nacional desarticula uno de los grupos de venta de droga más relevantes de la provincia con la detención de su líder y otros siete miembros
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Agentes de la Policía Nacional han desarticulado una banda criminal armada dedicada al tráfico de drogas con la detención de ocho de sus integrantes —siete varones y una mujer, cinco de ellos marroquís y tres españoles, de entre 26 y 36 años— en Alicante, Alcoy y Cocentaina.
Según ha informado Jefatura en un comunicado, las actuaciones dieron comienzo cuando el Grupo I de Crimen Organizado de la Policía judicial de Alicante tuvo conocimiento de que varios ciudadanos marroquíes, junto con otros españoles, se estaban dedicando al tráfico de marihuana y hachís en «grandes cantidades».
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Ante estos datos, los agentes abrieron una investigación a mediados de febrero de 2023, y en las primeras diligencias realizadas sobre delitos ajenos al tráfico de drogas —como robos con fuerza, robos con violencia o estafas—, los efectivos descubrieron que varios de los investigados cometían delitos de gravedad moderada individualmente.
Si bien, cuando se estudió pormenorizadamente sus entornos, se pudo descubrir un tejido ilícito profesionalizado con estabilidad a largo plazo, una estructura jerarquizada y un reparto de funciones claramente diferenciado. Además, salvo uno de los detenidos, al resto no se les conocía ningún tipo de actividad laboral y, sin embargo, todos llevaban «un alto tren de vida» y se les había visto hacer uso de un gran número de vehículos de alta gama.
Organización fuertemente estructurada y jerarquizada
En este sentido, la organización estaba perfectamente estructurada y contaba con un reparto claro de tareas, donde se podía diferenciar un líder, un integrante con funciones de guardaespaldas personal que lo acompañaba en el cierre de tratos para que actuara si fuera necesario y varios encargados de logística que habilitaban espacios de seguridad donde almacenar la droga y organizar su distribución.
Finalmente, en el último eslabón de la organización se encontraban los encargados de la venta y distribución de cantidades menores de hachís. De esta manera la explotación del «producto» se diversificaba mediante la venta a gran y pequeña escala, asegurando unos ingresos constantes de dinero, evitando la carencia de liquidez en el caso de que alguna de las ramificaciones de la organización tuviera perdidas.
Dispositivo de detención e incautación de droga y armas
El Grupo de Policía Judicial de la Policía Nacional estableció un fuerte dispositivo para la detención de todos los integrantes del grupo criminal, teniendo que contar con diferentes unidades especializadas, entre ellas la Unidad de Medios Aéreos de la Comisaría de Alicante.
También se desplazaron agentes del Grupo Operativo Especial de Seguridad (GOES) de la Jefatura Superior de Policía de la Comunidad Valenciana, quienes practicaron varias de las detenciones de los investigados en sus propias viviendas, intervenciones que fueron valoradas por la Policía Nacional como más delicadas.
Se realizaron varias entradas y registros en las diferentes localidades de Alcoy, Cocentaina y Alicante. Se consiguió la detención de 8 de los investigados. Salvo uno de los detenidos, el resto tenían antecedentes, y uno de ellos se encontraba en situación irregular en España.
La Policía Nacional se incautó de tres armas cortas municionadas de diferentes calibres, más de 50 kilogramos de marihuana, hachís en menor cantidad, y 100.000 euros en efectivo. También se intervinieron cuatro vehículos de alta gama que habían sido utilizados para cometer el ilícito, de los cuales uno de ellos fue encontrado en una localidad de Barcelona.
Hechos delictivos de alta gravedad con gran beneficio económico
Se ha podido ver que los involucrados contaban con armas cortas municionadas y listas para hacer fuego. Además, la existencia de la infraestructura móvil que contaba con gran cantidad de vehículos de gran cilindrada, les dotaba de una capacidad operativa que les permitía realizar con seguridad todas las actividades necesarias para cometer el delito.
La estabilidad temporal de este grupo criminal y la diferenciación de funciones de sus miembros, que tenían capacidad para llegar a intercalar sus roles sin que se resintiera el delito; sumado a la valoración de la droga en el caso de que la misma hubiera sido puesta en funcionamiento dentro del mercado ilícito, hacen que la Policía Nacional valore que la detención de estos investigados, está motivada por un delito de alta gravedad con grandes beneficios económicos.
Finalmente seis de los detenidos fueron puestos a disposición judicial de los Juzgados de Instrucción de las ciudades de Alcoy y Alicante, quedando la investigación abierta para la localización y detención de posibles ramificaciones de la organización que se están investigando.
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