Dimite el director general de la radiotelevisión pública valenciana À Punt
Alfred Costa renuncia al cargo «por motivos personales» cuatro años y medio después de ser elegido por concurso público
Su marcha se produce tras conocerse que el presidente de la Generalitat ofreció el puesto a una periodista el día de la DANA
Mazón comió el día de la DANA con la periodista Maribel Vilaplana para ofrecerle la dirección de la televisión valenciana
El director general de À Punt, Alfred Costa, ha anunciado este miércoles su renuncia «irrevocable» como máximo responsable de la radiotelevisión pública valenciana «por motivos personales» tras cuatro años y medio en el cargo.
Su marcha se produce pocos días después de que se conociera que el presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, ofreció su puesto a la periodista Maribel Vilaplana -una de las caras más conocidas de la extinta Canal 9- durante una comida el pasado 29 de octubre, día de la catastrófica riada. Vilaplana rechazó la oferta.
En este contexto, Costa espera que su dimisión, «fruto de una profunda reflexión», «permita acelerar el proceso de transformación de los medios de comunicación públicos que prevé la nueva ley», aprobada el pasado mes de julio.
El Consejo Rector de la Corporació Valenciana de Mitjans de Comunicació (CVMC) lo eligió tras un concurso público, en febrero de 2020, en base a su larga trayectoria en televisión. Las Cortes Valencianas ratificaron en marzo de 2023 su continuidad durante tres años más, hasta 2026.
Fue antes de que PP y Vox llegaran al Gobierno autonómico y sacaran adelante una nueva norma para À Punt que simplificó la estructura societaria -de dos entidades a una- y la forma en la que se elige a sus representantes. La ley indica que el director general será nombrado por el Ejecutivo a propuesta del Consejo de Administración.
Pese a que todavía restaban un año y medio de mandato, con el inicio del curso político ya empezaron a hacerse quinielas sobre quién relevaría a Costa al frente de À Punt. Uno de los perfiles que se puso encima de la mesa -con el aval del PP- fue el del, hasta octubre, director de Cope en la Comunidad Valenciana, Sergio Peláez.
De momento, el presidente del Consejo Rector de la CVMC, Miquel Francés, asumirá de forma interina sus funciones a partir del 9 de diciembre, según ha podido saber ABC. Cuándo se resolverá esa cuestión es todavía una incógnita, pues para poder nombrar a un nuevo director general es necesario que los partidos negocien primero la composición del Consejo de Administración. Las Cortes Valencianas podrán a elegir a sus miembros por mayoría absoluta, frente a la cualificada exigida por la anterior ley.
En un comunicado de despedida, Alfred Costa pone en valor «el esfuerzo titánico y el sacrificio personal de una buena parte de las plantillas y de los equipos directivos durante la extraordinaria cobertura de la DANA», haciendo referencia a todos los medios de comunicación.
«La cobertura realizada nos ha permitido reconectar como nunca con buena parte de la ciudadanía. Nunca nuestros valores de transparencia, independencia y proximidad han resonado tanto en las casas de centenares de miles de valencianos que han confiado en À Punt para informarse», señala.
Audiencias récord
Según datos de Kantar Media, el fatídico 29 de octubre, la televisión pública registró récord histórico de audiencia al alcanzar un 12,5% de share durante la jornada de la riada. El informativo de aquella noche se colocó como la emisión más vista de la historia de la cadena, que inició sus emisiones en 2018, con picos del 27,3%.
Costa agradece su equipo en la dirección del ente que aceptara «el reto de llevar adelante un proyecto empresarial y televisivo donde se sintieran representados todos los valencianos sin ninguna exclusión». También a los trabajadores que compartieron «desde el primer minuto la inquietud y el talento para conectar desde la información, el entretenimiento y la ficción con una audiencia que pedía 'ser sintonizada'».
Del mismo modo, muestra su gratitud con «las productoras del sector estratégico audiovisual que entendieron las exigencias y las necesidades de las nuevas realidades audiovisuales en general, pero también las muchas particularidades del modelo valenciano de radio y televisión autonómica, necesitada como siempre del apoyo financiero básico vital para desarrollar una industria muy competitiva en un mercado en constante renovación».
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