El despiste de un ladrón que ha permitido acabar con una banda profesional de aluniceros en Valencia

La Guardia Civil, en el marco de la operación «Royma», ha logrado desarticular un grupo criminal especializado en robos con fuerza en establecimientos públicos, utilizando el método del alunizaje en diferentes zonas de la Comunidad Valenciana.

La investigación comenzó tras el robo en una óptica en Guardamar del Segura (Alicante). Los autores, tres hombres entre 19 y 30 años, sustrajeron mercancía valorada en más de 35.000 euros. Los agentes encontraron el teléfono móvil de uno de los autores en dicho establecimiento, por lo que pudieron detener a los componentes de la banda.

Además, durante la operación, se realizó un registro en una vivienda en Madrid, donde se encontraron evidencias clave que vinculaban al grupo con un total de ocho robos en establecimientos públicos de las provincias de Alicante, Murcia y Castellón.

El grupo actuaba de forma organizada con roles bien definidos. Los autores primero sustraían vehículos de alta gama, utilizados posteriormente para ejecutar el alunizaje. Tras cometer los robos, abandonaban los vehículos en Madrid y, en algunas ocasiones, empleaban un extintor para crear una barrera de polvo y dificultar la persecución policial.

Los robos se planificaban minuciosamente. La fase de vigilancia permitía al grupo asegurarse de la viabilidad de su huida. La fractura y saqueo del establecimiento se realizaban en las madrugadas, aprovechando las horas de menor actividad para reducir riesgos.

A los detenidos se les imputan los delitos de pertenencia a grupo criminal, robo con fuerza, sustracción de vehículos a motor y hurto.

La operación ha sido llevada a cabo por la Unidad Orgánica de Policía Judicial de Alicante y el Equipo Territorial de Policía Judicial de Guardamar del Segura, con la colaboración de la Compañía de Getafe y del Puesto Principal de Guardamar del Segura.