Elgorriaga

Nadiuska y otras: de la fama al olvido

Ángel Antonio Herrera

El derrotado, o la derrotada, quedan bien, o muy bien, de coro novelesco, o de foto de retrato lírico, pero luego resulta que no ven de dónde pescar un pan de pensión y del hospedaje se ocupa la caridad, si hay suerte