El Colegio de Médicos se ofrece de mediador entre los facultativos y el Gobierno regional para acabar con la huelga
Plantea cubrir todas las vacantes –unas mil– y aumentar el gasto sanitario

A pesar del macropuente y la sucesión de fiestas, la huelga sanitaria en Atención Primaria sigue adelante, y está ya al final de su tercera semana. Con una caída del seguimiento, que según el Gobierno regional ayer rondaba el 9,35 por ciento. Con más fuerza que nunca, según el sindicato convocante. Con los pacientes cansados de una situación que ya se prolonga demasiado. Y con una propuesta nueva: la del Colegio Oficial de Médicos de Madrid, que se ofrece como mediador entre las partes para acercar el fin del conflicto.
El comité permanente de asistencia sanitaria del citado colegio profesional señala que el malestar actual en Atención Primaria obedece, en parte, a causas «del conjunto del Sistema Nacional de Salud» y, en parte, a otras «específicas de la propia Comunidad de Madrid». Y entre estas últimas, señala la falta de confianza de los médicos en la administración sanitaria, para lo que hay que «honrar los acuerdos alcanzados en años anteriores» y contar con los facultativos «en el proceso de toma de decisiones».
Además, lamenta que Madrid sea la comunidad «más rica de España y, a la vez, una de las que menos gasto sanitario público por habitante tiene». Según los datos publicados ayer por la Federación de Asociaciones en Defensa de la Sanidad Pública, esta cifra sería en Madrid de algo más de 1.400 euros per capita, en el ranking más bajo, frente a Asturias, País Vasco o Extremadura, que superan los 2.000 euros.
También denuncia el Colegio de Médicos que «desde hace varios años, Madrid es la comunidad que menor porcentaje del gasto sanitario público destina a la Atención Primaria (1/3 inferior a la media de España)». El dato del Ministerio de Sanidad en este punto señala que se ronda el 11 por ciento, en el extremo inferior de la tabla, mientras que Andalucía llega al 17,6 por ciento, y Castilla y León y Extremadura destinan a este fin el 16 y 15 por ciento, respectivamente.
Los motivos
Cumplir lo pactado
Recuperar la confianza de los médicos en la administración sanitaria debería ser un primer paso para solucionar el conflicto. Para ello, dice el Colegio que hay que «honrar los acuerdos alcanzados en años anteriores».
Más rica, menos gasto
Siendo Madrid la Comunidad más rica, lamentan en el Colegio que sea una de las que tiene menos gasto público sanitario por habitante. Y de las de menor porcentaje de gasto en Atención Primaria.
Quemados
La pandemia castigó mucho a los médicos. Un 92 por ciento de los de Atención Primaria y urgencias extrahospitalarias sufren el 'síndrome del burnout': están quemados, según el Observatorio de Salud Mental del Colegio.
Por ello, la entidad requiere a la Comunidad que elabore «un plan financiero para incrementar el gasto sanitario público y, de forma específica y a corto plazo, el destinado a Atención Primaria». Y una vez se cuente con el dinero, que se apunte bien a la hora de gastarlo: deben dedicarlo a «que exista tiempo suficiente para atender a los pacientes», que se «doten las plantillas de médicos de Atención Primaria que actualmente están sin cubrir (aproximadamente el 20-25 por ciento)» –unos 1.000 facultativos– y que se tomen medidas frente al 'síndrome del burnout' que sufren el 92 por ciento de los médicos madrileños de Atención Primaria y urgencias extrahospitalarias, «según el Observatorio de Salud Mental» del Colegio de Médicos.
La huelga está ya en su tercera semana, y sin visos de negociación entre las partes a la vista. El vicepresidente y portavoz del Gobierno, Enrique Ossorio, insistía ayer en la disposición del Gobierno regional: «Estamos con las manos abiertas para negociar». Pero, a renglón seguido, recordaba el audio que se conoció la semana pasada, en que una miembro del comité de huelga planteaba un cambio de estrategia que pasaría por alargar la huelga hasta abril, haciendo paros de un día a la semana, con objeto de no desgastar tanto a los profesionales, aunque manteniendo el paro; en ese audio también se apuntaba una posible huelga de celo. Pruebas, según el Gobierno, de la politización de esta protesta. Amyts, por su parte, insiste en que la Administración es «un muro» y que no aclaran quién atenderá a los pacientes fuera de agenda, si ésta se reduce a 34 personas por médico de familia y 24 por pediatra.
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