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El juez del «caso Palau» ordena investigar los pagos a CDC pero no inculpa a nadie

Solaz carga contra la Generalitat por el cambio de postura del Consorcio a la hora de pedir imputaciones

Janot guil y Janot guil

Un año y medio después de estallar el «caso Palau» y a poco de incorporarse como magistrado de la Audiencia de Barcelona, el juez instructor, Juli Solaz, (apodado el caracol por algún colega) ha ordenado abrir una causa aparte para investigar los presuntos pagos de Ferrovial a CDC a través del Palau —que podrían ascender a hasta 12 millones de euros— tras apreciar «indicios» de irregularidades. De esta manera, en un auto notificado ayer a la partes, el juez estima la petición de Fiscalía, aunque a diferencia del Ministerio Público —que en su día solicitó imputar, entre otros, del ex tesorero de CDC, Daniel Osàcar, y al secretario de Inmigración de CDC, Angel Colom—, Solaz declina inculpar por ahora a nadie e insta a las partes a poner nombres a sus acusaciones. Él difícilmente lo hará antes de que se concrete su traslado a la Audiencia, salvo sorpresa.

En su auto, el vilipendiado juez aprovecha la ocasión para censurar la «completa desorientación» del proceso que a su entender ha causado los «cambios de criterio» por parte del Consorcio del Palau a la hora de pedir una causa aparte e imputaciones y luego, ya con Mas presidente, desdecirse de esto último. Un cambio de postura que Solaz considera en su auto que obedece «a motivos completamente ajenos al ámbito jurídico procesal». La critica de Solaz, si embargo, es interpretado por algunos como una excusa para desviar la atención sobre su decisión de no pedir imputaciones, pese a poder hacerlo.

Antes de que CiU asumiera el poder en el Gobierno catalán, los abogados del Consorcio del Palau, que dependen de Presidencia de la Generalitat, pidieron abrir una causa aparte sobre los pagos a CDC e imputaciones. Pero con Mas ya presidente, se desdijo de pedir inculpaciones, un decisión tomada de forma unilateral que indignó a las otras dos administraciones, socialistas, que integran el Consorcio: el Ayuntamiento de Barcelona y el Ministerio de Cultura.

La decisión de Juli Solaz de abrir un nuevo plazo para que las partes se pronuncien sobre la pieza separada podría acabar prolongando durante meses las imputaciones, dado que lo más probable es que el instructor se traslade a la Audiencia de Barcelona sin citar a declarar a los posibles implicados en la trama de pagos de comisiones.

Las imputaciones quedarán entonces en manos del juez que sustituya provisionalmente a Solaz hasta que se designe a un nuevo titular del juzgado, lo que podría demorarse unos tres meses.

El informe de la Agencia Tributaria en que se basa la nueva investigación abierta por Solaz revela que la constructora Ferrovial habría pagado comisiones del 4% por la adjudicación de grandes obras públicas, de los que un 2,5% habrían ido a parar a CDC, y un 1,5% se lo habrían quedado los ex responsables del Palau de la Música.

La secretaria pide el archivo

Por otra parte, la secretaria de Fèlix Millet durante 35 años, Elisabet Barberà, ha pedido que se archive la causa en su contra por el desfalco del Palau de la Música, al considerar que no debe permanecer como imputada porque se limitó a actuar como secretaria sin sospechar de su jefe, como nadie entonces. Así consta en un escrito, al que ha tenido acceso ABC, que el abogado de Barberà, Sergi Mercé, ha remitido al titular del juzgado de Instrucción número 30 de Barcelona, Juli Solaz, después de que la ex secretaria de Millet compareciera como encartada el pasado 17 de enero. En su escrito, el letrado de Barberà, Sergi Mercé, subraya que no existen motivos para mantener la imputación contra su defendida, porque ésta se limitó a lo largo de su dilatada trayectoria junto a Millet a actuar como secretaria y que por tanto no era conocedora, como sostienen las acusaciones, del saqueo de la institución.

La defensa de Barberà subraya que ésta se limitaba a sus funciones como secretaria, por lo que anotaba documentos al dictado de Millet o apuntaba los ingresos y gastos de su jefe en el libro de contabilidad de sus gastos personales, aunque sin tener conocimiento del origen del dinero.

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