«Escalofrío» de Isidro Ortiz, «es un homenaje a Eduardo Manostijeras»
La semana pasada finalizó en Barcelona el rodaje de la última película de Isidro Ortiz, «Escalofrío», un thriller espeluznante sobre fenómenos paranormales donde la oscuridad es refugio y la luz una
La semana pasada finalizó en Barcelona el rodaje de la última película de Isidro Ortiz, «Escalofrío», un thriller espeluznante sobre fenómenos paranormales donde la oscuridad es refugio y la luz una amenaza.
El protagonista de este filme de terror clásico es Santi (Juno Valverde), un solitario adolescente que huye de la jungla de asfalto para resguardarse en un pueblo remoto. Pero allí se encontrará atrapado en un desfiladero, sospechoso de una serie de sucesos extraños de los que sólo podrá exculparse revelando el terrible secreto que el bosque oculta. Afortunadamente, Santi recibirá el apoyo de Leo (Jimmy Barnatán), un «freaky» aficionado a la parapsicología, que perderá la inocencia al estamparse contra el horror de lo real.
Y es que la realidad supera siempre toda supuesta ficción. Así de convencido se muestra Isidro Ortiz, que alude al escalofriante suceso del caníbal alemán que devoró en 2001 a otro hombre. «La realidad no necesita justificarse como la ficción», afirma el director tras explicar los entresijos que esconde la difícil tarea de infundir el miedo en los espectadores. Un miedo a lo extraño - encarnado, como en el cuento tradicional, por el bosque - que paraliza nuestro raciocinio y activa el impuslo primitivo de huir. «Escalofrío» juega por consiguiente con el miedo psicológico, que sin embargo invierte los roles: quizá el refugio sea el bosque.
Esta subversión de valores antitéticos, donde la luz es perjudicial y la oscuridad beneficiosa, es uno de los ejes principales de la historia, cuya metáfora sobre lo monstruoso se materializa en la extraña enfermedad «dermatológica» que sufre Santi. Es un homenaje al entrañable Eduardo Manostijeras, al tipo raro, al monstruo, al adolescente rechazado.
Rodada principalmente en exteriores agrestes (Navarra) y a horas intempestivas, no ha sido una película nada fácil para el equipo, que ha acabado «muy unido» según los actores Juno Valverde y Jimmy Barnatán. El director ha buscado siempre la perfección tanto a nivel artístico como técnico, poniéndo énfasis en este último, para el cual la clave es «tenerlo todo muy trabajado artesanalmente». A su vez, cita como influencia el nuevo terror oriental.
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