El Salón Náutico de Barcelona se convertirá en «Boatique» con barcos de más de 20 metros
La cita de octubre se enfocará a los compradores de embarcaciones y en la primavera de 2026 se estrenará un festival del mar para todos los públicos
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En su 62 edición, el Salón Náutico de Barcelona regresa con un cambio de rumbo después de que no se celebrara el año pasado por coincidir con la Copa América de Vela. La cita se mantiene en octubre en el Port Vell, pero con el nuevo concepto de «Boatique» que comporta una mayor oferta de embarcaciones, incluidas las de más de 20 metros de eslora, y un enfoque totalmente comercial para atraer a los compradores nacionales e internacionales. Para lograrlo, el nuevo Náutico prescinde de las actividades divulgativas y de iniciación al mundo del mar, que se trasladarán a un festival a celebrar en la primavera de 2026, de manera que será el único certamen de Europa con dos ediciones anuales.
El evento ferial de referencia de la náutica española ha presentado este martes su nuevo plan estratégico a tres años vista para reposicionar la cita como la cuarta europea, tras Düsseldorf, Génova y Cannes. Luis Conde, presidente del salón, ha explicado que la pausa de 2024 ha servido para pensar este nuevo enfoque que se deberá traducir en «un mayor interés por las embarcaciones y un mayor impacto en la ciudad y el mundo».
El salón se celebrará del 8 al 12 de octubre y a los habituales muelles de la Fusta y de España se unirá el de Barcelona, de manera que se ampliará la zona expositiva, no solo en tierra, con más de 12.000 metros cuadrados de superficie comercial, sino también en la muestra flotante, con una extensión lineal de 2,2 kilómetros. Para conectar los muelles de España y Barcelona se habilitará una conexión náutica.
A medio año vista, la organización prevé superar las cifras del año 2023, con más de 240 expositores y 640 embarcaciones, de las que unas 200 integrarán la muestra flotante. Josep Antoni Llopart, director del evento, ha señalado que el evento evolucionará para ser «un salón más profesional, cualificado y orientado a personas que planifican la compra de una embarcación». Con ese enfoque, se ampliará la gama de embarcaciones disponibles, no solo de distribuidores, sino que se aumentará la presencia de los astilleros dado el cambio hacia una plataforma de compraventa.
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Para lograrlo, también mejorarán la experiencia de compra, con un village de más de 2.500 metros cuadrados y una oferta gastronómica excluisiva. Por su parte, Jordi Carrasco, director general de la Asociación Nacional de Empresas Náuticas (Anem), ha subrayado que con estos planteamientos «el de Barcelona volverá a ser un Náutico relevante» y que «no tendrá que depender del momento del mercado». La previsión de visitantes será de 22.000 personas, menor que en pasadas ediciones al no tener el registro de todos los públicos y apostar por un nivel más cualificado de los visitantes.
El nuevo enfoque irá acompañado de la creación de un festival del mar, previsto a partir de la primavera de 2026 para dar respuesta a la iniciación al deporte y otras actividades náuticas.
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