El Secretariado Gitano denuncia una «discriminación estructural» que lleva al 63% de los jóvenes a abandonar la ESO

La Fundación Secretario Gitano ha denunciado este miércoles en Valladolid una «discriminación estructural» que impide una educación «inclusiva» y de «calidad», que afecta «sobremanera» a la población gitana, tras denunciar que el 63 por ciento de los jóvenes de la etnia no termina la ESO. «El derecho a la educación está en la ley pero no está garantizado para el pueblo gitano», sentenció la directora general de la Fundación Secretariado Gitano, Sara Giménez.

No en vano, ha subrayado el «punto de desventaja» que tiene el alumnado gitano y ha apostado por incrementar las aulas fuera del horario escolar, con profesores particulares; la tutorización; la orientación educativa y mejorar el acceso a la digitalización, sin olvidar el trabajo con las familias. «Todos los gitanos y las gitanas deben ver la educación como la herramienta de futuro y progreso de los niños», ha añadido.

Con motivo de la presentación del estudio 'Situación educativa del alumnado gitano en España' por parte de la Fundación Secretariado Gitano, que ha tenido lugar en la sede del Consejo Económico y Social (CES), Giménez se ha preguntado hacia dónde va el progreso de un pueblo si no tiene garantizado el derecho a la educación. Por ello, ha reiterado que el progreso del pueblo gitano pasa por la educación, que le permitirá tener autonomía y acceso a un empleo y una vivienda digna, lo que obliga a revertir la situación de segregación. En la actualidad, el 86 por ciento de las personas gitanas vive bajo el umbral de la pobreza.

Noticia Relacionada

Sara Giménez: «Necesitamos a un ministro gitano o, por qué no, a un jefe del Gobierno gitano»

Érika Montañés

La portavoz de Igualdad de Cs y presidenta de la Fundación Secretariado Gitano rompió moldes desde que fue la primera mujer en su familia en graduarse

Ante esta situación, según recoge Ical, ha abogado por «ahondar» en cuál es el itinerario educativo, lo que pasa a los niños y las familias gitanas, cómo trabajar en alianza y dar respuesta a un «gran pilar» que permitirá tener una vida adecuada. Y es que ha considerado que, en la actualidad, los gitanos no son ciudadanos de pleno derecho por que las brechas de desigualdad «azotan» a la etnia. «Seguimos en la cola de la sociedad», ha precisado.

Muchas de las medidas planteadas, ha recordado, están recogidas en el programa Promociona, puesto en marcha en 2009 por la Fundación, que tiene como objetivo lograr que cada vez más jóvenes gitanos logren el éxito escolar en la Educación Secundaria Obligatoria y continúen estudiando para lograr así rebajar las cifras de abandono prematuro de los estudios, al apuntar que la mayor parte de los padres no está instruida. Utiliza una metodología basada en el desarrollo de itinerarios educativos personalizados. Actualmente, Promociona se desarrolla en 49 ciudades de 13 comunidades autónomas, entre ellas seis de Castilla y León. También citó las becas Luis Sáez, que buscan favorecer la continuidad y el éxito de jóvenes gitanas que quieren continuar su formación universitaria a través de estudios de postgrado. En concreto, dota a mujeres gitanas de un apoyo económico y una orientación académica que aseguren la consecución de su itinerario formativo, con la matrícula en estudios de postgrado en cualquiera de las universidades públicas de Castilla y León.

En presencia del secretario general de la Consejería de Educación, Jesús Hurtado, la directora general de la entidad destacó que Castilla y León es un referente en los resultados de PISA pero ha manifestado que la Junta tiene una «asignatura pendiente» con el alumnado gitano y su especificidad. «No se ha llegado a esa capacidad de éxito educativo que sois capaces de alcanzar con el alumnado de la población general», ha señalado.

En el mismo sentido se ha pronunciado la directora autonómica de la entidad, Mar Fresno, quien ha defendido la necesidad de poner en marcha actuaciones encaminadas a mejorar la escolarización de los niños en la etapa de 0 a 6 años, con una incorporación tardía a la Educación Infantil; reducir el absentismo; bajar la «desproporcionada» tasa del fracaso escolar y del abandono y trabajar de «manera intensiva» en el tránsito entre la etapa de educación obligatoria y post obligatoria, ya que solo el 0,4 por ciento del alumnado gitano ha completado algún nivel de Educación Superior.

El informe también recoge la menor esperanza de vida escolar del alumnado gitano, de 12,2 años frente a los 18,7 de la población general; el elevado porcentaje de 'ninis', ya que tres de cada cinco jóvenes gitanos (entre 16 y 24 años) no estudian ni trabajan; la falta de alternativas para el retorno educativo, después de que solo el siete por ciento de la población entre 18 y 24 años se reengancha a los estudios reglados, y que la Formación Profesional Básica es la principal alternativa -28,3 por ciento frente al ocho por ciento de la población general-. «Son datos muy horribles y muy duros», ha valorado Giménez.

Por su parte, el presidente del CES, Enrique Cabero, ha declarado que la educación es la gran herramienta de la igualdad, el progreso y el bienestar personal, individual y colectivo. De ahí que destacara algunos aspectos «preocupantes» del informe como la llegada posterior de la población gitana al sistema educativo; la menor estancia en el sistema educativo; el mayor fracaso escolar y las «complicadas» y «reducidas» posibilidades de reengancharse y las dificultades para cursar los estudios superiores. «Queda mucho por avanzar», ha concluido.