Ocho presos heridos en una pelea multitudinaria con armas blancas de fabricación casera en la cárcel de Dueñas (Palencia)
Los heridos tuvieron que ser trasladados «de urgencia» al hospital y en la prisión se ha habilitado un espacio de «forma provisional» para salvaguardar «la integridad» de algunos de los recursos participantes en la riña
Un interno de la prisión de Dueñas quema su celda y arroja un colchón en llamas a los funcionarios
Una pelea multitudinaria con armas blancas de «fabricación casera» entre un «elevado número» de internos en la cárcel de Dueñas (Palencia) ha dejado este jueves ocho reclusos heridos que han tenido que ser trasladados «de urgencia al hospital».
Así lo ha denunciado a través de sus redes sociales el sindicato Tu Abandono Me Puede Matar, mayoritario en la prisión palentina, que ha asegurado que se trata de «otro incidente grave» en el centro penitenciario.
Fue sobre las 19,30 de la tarde cuando en el módulo 4 de la cárcel La Moraleja se inició la riña entre «numerosos» internos, resultando ocho de ellos heridos por «arma blanca de fabricación casera».
"Numerosos objetos cortantes"
«A pesar de la intervención de los funcionarios, no se han podido evitar todas las agresiones debido al elevado número de internos inmersos en la pelea que portaban numerosos objetos cortantes», han apuntado en un comunicado.
Además, la prisión ha tenido que habilitar uno de los departamento del centro que permanecía vacía para «de forma provisional» salvaguardar la «integridad» de algunos de los participantes en la reyerta.
La situación en este centro penitenciario «se está tornando cada vez más insegura», han denunciado, con «numerosos incidentes y agresiones a los trabajadores», aunque en esta ocasión «afortunadamente» no ha habido ningún funcionario herido, han indicado.
La política actual de la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias «está llevando a la institución a un auténtico fracaso del sistema» sin que se pueda garantizar la «seguridad de los internos y los trabajadores», han manifestado.
«La falta de autoridad y la negligente falta de apoyo hace que cada día se vivan situaciones especialmente peligrosas», han concluido.
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