Los caballos que aprendieron a susurrar a las personas

Una de las organizaciones que se ha apoyado en la ayuda de los animales es la Asociación de Atención a las Personas con Parálisis Cerebral y Afines (Aspace) de Palencia, a través del desarrollo de terapias ecuestres.

Este programa es posible gracias a un convenio de colaboración firmado en 2007 con la dirección general del Instituciones de Penitenciarías, junto a un convenio económico de colaboración con la Diputación provincial de Palencia.

Aspace Palencia viene realizando este programa desde hace tres años, donde participan 20 niños, apoyados por diferentes profesionales como son, educadores sociales, fisioterapeutas, monitores de terapias ecuestres y monitores de ocio y tiempo libre.

La pecualiaridad de este programa es que combina varias terapias rehabilitadoras, ya que también participan cuatro internos del centro penitenciario «La Moraleja», de Dueñas, los cuales han sido formados como monitores de terapias ecuestres a lo largo de estos tres años de experiencia.

«Los internos además de realizar el voluntariado con nuestra asociación los sábados por la mañana, se encargan durante toda la semana del cuidado y adiestramiento de los equinos, además de dirigir la propia terapia con otros internos del centro, un día a la semana», explican desde Aspace. En el siglo XVII se comienzan a difundir programas de salud que toman al caballo como medio de cura. Estos surgen inicialmente en Europa, como el modelo alemán que toma el movimiento del caballo como base del tratamiento, para luego extenderse a los Estados Unidos. Esta terapia se emplea desde los años 60 de forma sistemática en todo el mundo.

La equinoterapia o terapia ecuestre en la actualidad se desarrolla en nuestro ámbito persiguiendo objetivos en el corto y largo plazo, llevando un registro del proceso individual de cada paciente, evaluando constantemente la funcionalidad de los animales y coordinado por un equipo interdisciplinario integrado por profesionales de la salud y veterinarios.

Desde Aspace explican que la «equinoterapia» o terapia asistida con caballos, es una actividad que toma al caballo como intermediario para favorecer el desarrollo y habilitación de las funciones psicofísicas de la persona con discapacidad.

«Esto se logra fácilmente debido al tipo de movimientos que hace el animal al desplazarse. Mejora el movimiento autónomo, favorece el desarrollo de su equilibrio estático-dinámico y consecuentemente optimiza sus desplazamientos». La hipoterapia es una alternativa terapéutica que se basa en estimular los músculos y articulaciones del paciente a través del movimiento tridimensional que tiene la monta del caballo, también el contacto del caballo tiene características de terapia a niveles cognitivos,comunicativos y de personalidad.