El bebé hallado muerto en Burgos tenía aún el cordón umbilical

A la espera de datos de la autopsia que puedan desvelar algún detalle más, la Policía Nacional sigue investigando para aclarar todo lo relacionado con la aparición de un bebé recién nacido a orillas del río Arlanzón. El cadáver fue halla en la tarde del martes completamente desnudo y todavía con parte de la placenta y el cordón umbilical.

Fueron unas chicas que paseaban a sus perros las que encontraron accidentalmente al bebé. Se encontraba en una zona del río que no es visible desde la parte habitual de paseo. Cuando los perros se acercaron al lugar y empezaron a olisquear, las jóvenes decidieron acercarse a ver qué ocurría. Primero alertaron a la Policía Local, aunque advirtiendo de que podía ser un muñeco. Sin embargo, cuando los agentes locales llegaron al lugar confirmaron que se trataba de un bebé y avisaron a la Policía Nacional.

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P. S.

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El comisario provincial de Policía Nacional, Jesús Nogales, reconoció que la investigación está todavía en una fase «muy preliminar». Una de las claves será el resultado de la autopsia. Será determinante para conocer detalles como si el bebé nació de un «embarazo a término», si pudo nacer muerto o si alguien le dejó a la intemperie aún con vida y provocó su fallecimiento. La diferencia puede ser que se considere una infracción no grave de los derechos humanos o que pueda llegar a considerarse un asesinato, explicó ayer el comisario.

Agentes de Policía Nacional peinaron también ayer los tramos del río Arlanzón aguas arriba en búsqueda de algún indicio o rastro, incluso alguna ropa que pudiera aclarar si el bebé fue depositado directamente en el lugar donde se encontró o pudo ser arrojado en algún tramo aguas arriba.