Junta y municipios exigen al Gobierno un nuevo reparto de los fondos locales

A la «incertidumbre» en el impuesto de las plusvalías que va a parar a la caja de los ayuntamientos, se suma que no saben aún si continuará suspendida la regla de gasto ni qué pasará con las liquidaciones negativas que resultan como diferencia de la previsión de lo que las entidades recibirán del Gobierno y lo que realmente llega. La inflación, el nivel de deuda y otros aspectos económicos generales también afectarán a las entidades locales, que reclaman una renovación de un modelo ya anticuado. Todo ello conlleva una «inseguridad» a la hora de afrontar este año «y veremos los siguientes», recalcó Armisén. Los datos y la «prudencia de los alcaldes», que «no van a generar situaciones de dificultad financiera para los ayuntamientos», hacen que se presente un «escenario complicado» para que se puedan plantear por su parte proyectos a medio y largo plazo.

La reivindicación de las corporaciones locales cuenta con el respaldo de la Junta y así lo trasladó el consejero de la Presidencia, Ángel Ibáñez, quien llegó a calificar de «trampa para los ayuntamientos» el hecho de que cuenten con un dinero basado en las previsiones del Gobierno que más tarde no se ajusta a la realidad y habitualmente es menor. «La diferencia entre lo que reciben del Estado y de la Junta es crucial», indicó, porque las del Ejecutivo central suelen ser previsiones demasiado «optimistas». Mientras, el Gobierno autonómico lo tiene «asegurado por ley» y solía entregarlo a través de tres entregas cuatrimestrales. A partir de ahora, y como ya se hacía con los municipios de menor tamaño, la Junta hará un anticipo global al inicio de año a los consistorios de más de 5.000 habitantes «para que sepan con lo que van a contar» .

Y ese adelanto de liquidez es recibido como un «soplo de energía» en los ayuntamientos, expresó la alcaldesa de Vitigudino, Luisa de Paz, que reconoció también estar «muy preocupada» por cómo encarar 2022. «Tener la certeza de que tienes liquidez significa que puedes actuar», explica. También ayudarían los fondos europeos -aún se desconoce cómo llegarán y en qué montante a las entidades locales-. Por eso, espera que en el reparto no primen «los criterios ideológicos» y poder gestionarlos directamente. «Queremos participar en la recuperación», indicó al respecto Ángeles Armisén, que exigió que se trate a los ayuntamientos como lo que son, «administración con su autonomía y derecho a recibir fondos para los ciudadanos que han sufrido la pandemia».

Fundamental también es para los empresarios que haya «certeza económica» y saber que los ayuntamientos cuentan con «liquidez», indicó el presidente de la patronal de Ávila, Juan Saborido, quien remarcó que les interesa «mucho» la solvencia de las administraciones para poder cobrar los proyectos que desarrollan para ellas.