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Gila 'resucita' en los juzgados de Talavera: «Hola, que vengo para ir a la cárcel»

Un guardia civil relata en 'X' la situación «surrealista» que vivió con un joven al que buscaba supuestamente la policía, según el propio interesado y sus padres

Tiroteo en la A-5: se entrega el delincuente que se dio a la fuga en Santa Cruz del Retamar

Fachada del palacio de Justicia Google maps
Manuel Moreno

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Dani es un guardia civil curtido en mil batallas y lleva cuatro años trabajando en el palacio de Justicia de Talavera de la Reina. En este tiempo, no le había sucedido nada similar a lo que le ocurrió este lunes. «Fue una situación surrealista, a lo Miguel Gila», resume lo que ha relatado brevemente en la red social 'X'.

Sobre las once de la mañana, según ha contado a ABC, un veinteañero marroquí se presentó con su Número de Identidad de Extranjero (NIE) en el edificio y le dijo que la Policía Nacional había ido a su casa para llevarlo a prisión. «Mire, que fue la policía para buscarme porque tengo que ir al calabozo del juzgado, pero yo no estaba en casa y mis padres me han dicho que venga», comenzó narrando al guardia. «¿Pero cómo va a venir al calabozo? Será que le tengan que detener», puso en duda el agente. «Sí, bueno, no sé; al calabozo, a la cárcel», respondió su interlocutor.

El guardia asintió y le indicó que se sentara. «Pórtate bien y no te pongo los grilletes», informó al muchacho. «No tengo ningún problema; si tengo algo que pagar, lo pago», contestó el chaval antes de que el agente llamara a la comisaría de la Policía Nacional en Talavera.

Como no le cogían el teléfono, contactó con el 091. Se identificó, explicó que un joven iba contando que la policía lo buscaba y que, por ende, solicitaba una patrulla. Dani facilitó su nombre y apellidos, su DNI y su TIP (Tarjeta de Identidad Profesional). El agente que le atendía verificó que era guardia civil y preguntó a continuación dónde estaba de servicio. Dani contestó y facilitó también los datos del hombre.

Después de «esperar un momento», el interlocutor del 091 informó que no venía en la base de datos nada contra el ciudadano. «Y entonces, ¿qué hago?», preguntó Dani. «Que se vaya», respondió el policía. «¿Entonces no mandas una patrulla?», cuestionó el guardia. «No, ¿para qué la voy a mandar?», contestó al otro lado del teléfono.

En el 091 el funcionario se disculpó «amablemente por tanta parafernalia, diciéndome que se tienen que justificar muy bien para qué se accede a la base de datos», escribe en 'X' Dani, quien informó al ciudadano. «Se puede ir», le invitó. «¿Dónde tengo que ir?», inquirió el joven, que «pensaba que se iba al calabozo», recuerda el guardia. Por eso, le preguntó si estaba bien mientras el chaval lo miraba «mosqueado».

Al momento, llegaron sus padres. «No sabemos lo que pasa con la policía, pero nuestro hijo tiene que ir al calabozo», confirmaron. Finalmente, el joven se marchó sus progenitores por donde había venido y Dani sigue pendiente de si el muchacho vuelve a los juzgados, pero ya detenido.

 

En su mensaje en 'X', el agente termina lanzando una crítica a 'Toletum', una base de datos personales extraoficial empleada por la Comandancia de Toledo, que ha sido sancionada por la Agencia Española de Protección de Datos por tres infracciones graves, como informó ABC la semana pasada. «Lo difícil que es acceder a una base de datos para verificar quién soy, que me parece muy bien, y lo fácil que era entrar en la base de datos 'Toletum', a la que podía acceder cualquiera que fuera guardia civil», discurre Dani.

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