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Tiroteo en la A-5: un delincuente se da a la fuga y su novia de 14 años resulta herida de bala en un hombro

El individuo intentó arrollar a los guardias civiles que le dieron el alto en medio de la calzada, a la altura del término municipal de Santa Cruz del Retamar

Hallan los cuerpos sin vida de un matrimonio en su casa de Pantoja con signos de violencia

Momento en el que se produce el tiroteo ABC
Manuel Moreno

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La Guardia Civil busca a un conocido delincuente involucrado en un tiroteo en la A-5 (autovía del Suroeste) la semana pasada. Cuando unos guardias civiles trataban de identificarlo en medio de la calzada, exhibió un arma de fuego e intentó arrollar a los funcionarios, según las fuentes consultadas por ABC. Ocurrió por la tarde, a plena luz del día a la altura del pueblo toledano de Santa Cruz del Retamar, con numerosos conductores como testigos, ya que la intervención policial bloqueó la circulación y provocó retenciones.

Fueron unos agentes del puesto principal de Valmojado los que detuvieron un coche oscuro para identificar a sus ocupantes, un conocido malhechor de la zona y su novia, de 14 años. Dos guardias abrieron la puerta del conductor, quien se negó a salir. Seguidamente, aceleró e intentó atropellar a los agentes, que usaron el arma reglamentaria al ver que el tipo había sacado una pistola. Se oyeron unas detonaciones y algún disparo debió de alcanzar el vehículo que se daba a la fuga mientras otros usuarios grababan la escena.

Más tarde, la joven pareja del delincuente se personó sola en el centro de salud de Torrijos, a unos 15 kilómetros, desde donde avisaron a la Guardia Civil. La niña llevaba un impacto de bala en un hombro. Era una herida limpia con un orificio de salida y otro de entrada, si bien fue derivada al Hospital Universitario de Toledo.

Vecina de la cercana localidad de La Puebla de Montalbán, dijo que había sido disparada mientras caminaba por la calle Año de la Ciencia de Torrijos, a 15 minutos andando del centro de salud. «Se me quedó muerto el brazo», contó, «y empecé a sangrar». Sin embargo, la Policía local constató que no había sucedido nada de eso en esa calle, donde hay instaladas cámaras municipales de seguridad. Luego la chica admitió a los agentes de Policía Judicial de la Guardia Civil que iba en el coche de su novio cuando ocurrió el tiroteo en la A-5.

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