Sin rastro de la mujer desaparecida en Valmojado: fue a ver si había entrado agua en su casa por la DANA
Decenas de guardias civiles de varias especialidades ya han rastreado más de cuatro kilómetros. La buscan a pie, con perros adiestrados y un dron en el cauce del arroyo del Monte, a partir del punto en el que el asfalto de la carretera se hundió a 600 metros de Valmojado
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Ocurrió la madrugada del lunes, cuando la gota fría había descargado sin misericordia en esa zona, y desde entonces no se sabe nada de ella, una mujer de 54 años. Había salido de El Casar de Escalona pasada la medianoche y se dirigía a Casarrubios del Monte, a 56 kilómetros, con la intención de ver si había entrado agua en su casa, como le había sucedido justamente dos años antes, cuando otra terrible DANA atizó con una virulencia inusitada gran parte de la provincia de Toledo .
La conductora circulaba en su coche desde Valmojado hacia Casarrubios del Monte cuando, a 600 metros de la última rotonda en dirección a la localidad vecina, el asfalto de la carretera CM-4004 se había hundido justo debajo del arroyo del Monte, que venía embravecido por la DANA. Su turismo, un Seat Altea de color rojo, fue engullido por la riada y apareció volcado varios cientos de metros arroyo abajo.
Sin embargo, la Guardia Civil no ha encontrado todavía a la mujer, cuya desaparición fue denunciada oficialmente por su marido este martes, y los familiares están siguiendo la búsqueda en el propio lugar.
Decenas de agentes ya han rastreado a pie más de cuatro kilómetros arroyo abajo, entre mucha maleza y tierra, llegando a pasar por debajo de la autovía de La Sagra, la CM-41. Tampoco ha habido suerte de momento con los dos perros del centro de adiestramiento de El Pardo, en Madrid: uno está dedicado al rescate de personas desaparecidas y otro está especializado en la búsqueda de restos cadavéricos.
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Agentes de la Unidad de Seguridad Ciudadana (Usecic) de Toledo, que inspeccionaron meticulosamente la zona el lunes con la ayuda de un dron, continúan este martes. Ahora siguen con el apoyo de otros compañeros del GEAS (especialistas en actividades subacuáticas); el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona), de Montaña y de varios efectivos de los puestos de la Guardia Civil en la zona.
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