'La hormigonera de los chicos de Avanti', una buena perola para hacer migas

Elisabeth Bustos

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21/04/2024 a las 19:09h.

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Dicen que las buenas ideas aparecen casi siempre en la barra de un bar. Eso es precisamente lo que les ocurrió a Adolfo, Adam y Felipe, vecinos de San Pablo de los Montes, cuando recibieron un encargo de Alicia, exalcaldesa del municipio: cambiar los huevos con chorizo, un menú típico que se servía en las fiestas patronales, por algo más elaborado y tradicional de la tierra, unas migas de pastor.

Un reto, aparentemente fácil, sobretodo para Adolfo y Adam, hermanos, que han mamado la hostelería desde pequeños. Sus padres, Agustín y Purificación, llevan toda la vida regentando 'El Oasis', un complejo turístico de más de 7.000 metros cuadrados.

Sin embargo, había que hacerlo con cuidado, porque esta comida requiere de una elaboración «más trabajosa, ya que hay que removerlas muy bien para que no se quemen». Y también el número de comensales, que hace siete años rozó los 2.400.

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Los tres, socios de la promotora de eventos Avanti Group, empezaron a darle vueltas a la cabeza para ver de qué manera podrían conseguir el objetivo. Y a Felipe se le encendió la bombilla: «¿Y si compramos una hormigonera para removerlas?», soltó a sus amigos.

Dicho y hecho. San Pablo de los Montes tuvo la perola más grande de su historia: una hormigonera de unos 80 litros para abastecer al pueblo. «Hicimos una serie de modificaciones, como instalar un infiernillo de gas. Por dentro la hormigonera es de acero, al igual que los utensilios de cocina de nuestras madres durante toda la vida», se justifica Adolfo, cuyo invento se ha hecho ahora viral en las redes.

Su madre se echó las manos a la cabeza cuando escuchó la idea. «Le dije: 'Madre, déjame probar'», y en un evento familiar la hormigonera comenzó a rodar y rodar con un resultado sorprende: las migas estaban buenas.

El empresario, de 37 años, puntualiza que aquí no solo es importante el trabajo de la hormigonera, sino también que los ingredientes utilizados «sean de calidad», además de que el remojo de las migas y el sofrito. «Nuestras migas llevan lomo adobado, chorizo, panceta, pimiento, ajo y luego también freímos un huevo. Gustan mucho», afirma. Al igual que le gustaron a su madre cuando las probó por primera vez.

Ahora los números sí cuadran. La hormigonera saca «raciones abundantes». De cada tanda se sacan unas 80 raciones cada 20 minutos. «En el pueblo damos de comer a unas 600 u 800 personas. Empezamos a cocinarlas sobre las dos y a las cuatro y media ya han comido todos».

Pero las aspas de 'la hormigonera de los chicos de Avanti', como la conocen en el municipio, no solo han removido migas. Reconocen que, aunque «se nos han pasado auténticas burradas por la cabeza», solo se han atrevido a experimentar con las palomitas de maiz. «Mi amigo Felipe propuso en un evento infantil hacer palomitas para los niños; echamos aceite y varias bolsas de maíz y salieron palomitas para aburrir», recuerda.

Se mueven como pez en el agua en el mundo de la organización de eventos y han exprimido su imaginación en más de una ocasión, llegando a adaptar un contenedor portátil de barco de seis pies. En su interior habilitaron una barra de bar con unas escaleras en uno de sus laterales y construyeron un escenario para «lo que surja», con pantalla leds y luces. «Tienes todo concentrado. Pones un chiringuito en una explanda y tienes sevicio de comida, bebida y escenario. Incluso en algunos eventos lo hemos puesto de terraza», dice.

Ahora,'los chicos de Avanti' se centrarán en los festivales de verano. Con Adolfo de Dj a la cabeza. Y la hormigonera que tantas alegrías les está dando dejará de rodar un tiempo para tomarse un respiro.