El Sescam tendrá que pagar 116.845 euros por no diagnosticar a tiempo un cáncer de esófago en Albacete
La sentencia acredita que la actuación negligente del hospital provocó la metástasis de un paciente de 41 años que acabó falleciendo
![La familia del fallecido acudió a la Asociación El Defensor del Paciente](https://s1.abcstatics.com/abc/www/multimedia/espana/2024/12/11/sescam-RLZcVOQsgBABqM0ctgwPIqM-1200x840@diario_abc.jpg)
El Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 2 de Albacete ha condenado al Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (Sescam) a pagar una indemnización de 116.845 euros, más intereses, a la madre y los hermanos de un paciente por una actuación negligente del ... hospital de Albacete a la hora de diagnosticar y tratar un cáncer de esófago por el que acabó muriendo, según ha informado la Asociación El Defensor del Paciente.
El paciente, de 41 años y residente en Albacete, acudió al hospital el 9 de julio de 2020 por vómitos de repetición de color negro y se le realizó una gastroscopia urgente que evidenció una esofagitis por reflujo grado D. Durante los meses posteriores acudió regularmente a Urgencias y a su médico de cabecera con síntomas digestivos, dolor de cadera, anemia y pérdida de peso, pero los facultativos no vieron la necesidad de repetir la gastroscopia.
El 28 de abril de 2021, es decir, ya casi diez meses después, un estudio endoscópico digestivo evidenció la presencia de un adenocarcinoma de esófago y, a continuación, un estudio ampliatorio reflejó que el cáncer se había extendido. Tras un tardío tratamiento de quimioterapia, el paciente falleció el 13 de noviembre de 2022.
Su familia se dirigió entonces a El Defensor del Paciente, que formalizó la reclamación patrimonial administrativa y posterior demanda. El Sescam admitió la defectuosa asistencia sanitaria prestada al paciente, aunque consideró que la indemnización debía reducirse a un 41% de lo solicitado por la familia.
Sin embargo, ahora la sentencia del Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 2 de Albacete estima íntegramente las pretensiones de la familia y expone que ha sido acreditado «que existió un retraso diagnóstico de su adenocarcinoma de esófago que padecía, lo que provocó la evolución de la enfermedad desde una fase localizada a una metástasis avanzada».
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