Castilla-La Mancha
Martínez Lizán desmiente a Asaja: «Cualquier explotación ganadera tiene un completo sistema de control»
El secretario regional de la asociación agraria, José María Fresneda, criticó este lunes «la absoluta inseguridad en la que está inmersa la ganadería, sobre todo, con el problema sanitario»
Castilla-La Mancha levanta las últimas restricciones de la viruela ovina y caprina

Tras las críticas y el aviso de este lunes de Asaja por «la absoluta inseguridad en la que está inmersa la ganadería, sobre todo, con el problema sanitario», el Gobierno de Castilla-La Mancha, en boca del consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Julián Martínez Lizán, quiso desmentir ayer esa afirmación.
«Cualquier explotación ganadera tiene un completo y complejo sistema de control, de vigilancia y de supervisión por parte de los veterinarios», aseguró en una rueda de prensa Martínez Lizán, que informó de que «toda la entrada de animales que provengan de terceros países tienen que cumplir unos rigurosos procedimientos en elaboración de guías y control sanitario para que puedan venir a nuestro país».
El consejero puso como ejemplo la aparición de la viruela ovina en la comunidad autónoma, que «ha supuesto un problema pero también la garantía de que se ha actuado contundentemente», con «perjuicios» para la actividad, reconoció, pero con iniciativas que han hecho «que finalmente, en menos de un año», se consiguiera «dar por erradicada» esta enfermedad «preocupante» para la actividad ganadera.
También citó otra patología como la enfermedad hemorrágica epizoótica, que «fue muy alarmante cuando entró» pero que finalmente tuvo consecuencias concretas limitadas de un 1% de mortalidad y menos de un 7% de morbilidad».
«Son cuestiones que vienen muchas veces sobrevenidas», comentó, a pesar de lo cual, presumió, Castilla-La Mancha ha ampliado «un 14,5%» el presupuesto destinado a sanidad animal.
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