La expropiación del aeropuerto se apunta como una posible solución
Tal como contemplara la presidenta regional, María Dolores de Cospedal durante la campaña electoral
El anuncio de Vueling de abandonar el Aeropuerto Central de Ciudad Real el próximo 29 de octubre, ha provocado numerosas reacciones entre la clase política y social de la ciudad. Mientras el Partido Popular responsabilizaba al anterior Gobierno regional de José María Barreda de la agonía de la infraestructura derivada de la «nefasta gestión política» que llevaron a cabo, el Partido Socialista se lavaba las manos sobre la actual situación en la que se encuentra el Central.
El alcalde en funciones de la capital, concejal de Economía y Hacienda y director de la Oficina de Eficacia Presupuestaria de la región, Miguel Ángel Rodríguez, indicó que el anterior ejecutivo regional, sólo adoptó decisiones «coyunturales y no estructurales» para garantizar el futuro del aeropuerto, pero estas medidas, basadas en subvenciones, en dinero público «se ha demostrado que no funcionan, ya que cuando se acaba el dinero, se comprueba que el aeropuerto no es rentable para las compañías aéreas», indicó
Rodríguez afirmó desconocer que exista alguna solución concreta encima de la mesa para solventar esta compleja situación, pero sí quiso recordar que María Dolores Cospedal, durante la campaña electoral ya a apuntó a medidas como la expropiación si los gestores actuales no eran capaces de hacer viable la infraestructura. Una opción que para Izquierda Unida es un «auténtico disparate». A juicio de la coalición, «expropiarlo para luego venderlo sería socializar una vez más sus pérdidas y privatizar sus ganancias, si las hubiera alguna vez», indicaron.
El alcalde en funciones de la capital lamentó «profundamente que Vueling haya hecho este anuncio y seguiremos trabajando como Ayuntamiento en la medida que nos corresponda para hacer viable el Aeropuerto».
Por su parte, el portavoz municipal, Francisco Cañizares, fue más allá y señaló que han faltado «criterios de eficacia» tanto por parte de la empresa privada que lo promovió como por parte de la gestión política, relacionando este hecho con lo ocurrido con Caja Castilla La Mancha.
Sin embargo, remitió a la decisión que tomen en su momento los actuales administradores concursales sobre la infraestructura para ver cuál puede ser la solución.
En este sentido, desde IU se preguntaron cuándo ofrecerán los administradores concursales una solución. «Ya sea venta, segregación o liquidación de la sociedad que lo gestiona, algo hay que hacer para frenar la sangría de dinero, ilusiones y falsas expectativas», añadieron.
Por su parte, el portavoz del Grupo Municipal Socialista en la capital y exdelegado de la Junta en Ciudad Real, José Valverde, defendió que las ayudas que se han facilitado a la infraestructura tenían como intención «apuntalar» la situación del aeropuerto y criticó que el PP haya dado «patadas» a los puntales que se han intentado poner desde el anterior regional.
Valverde cree que se debe «trabajar» y buscar de manera conjunta con el resto de administraciones salidas para el Aeropuerto de Ciudad Real.
El concejal socialista reconoció su desacuerdo con algunas decisiones tomadas por los gestores privados del aeropuerto. Valverde explicó que la marcha de Vueling va a coincidir con el final del acuerdo suscrito en su día con el Gobierno de Castilla-La Mancha para la promoción turística de la zona.
Precisamente, a este respecto IU señaló que la Sociedad de Infraestructuras Aeroportuarias de Castilla-La Mancha otorgó 2,36 millones de euros a la compañía aérea para operar en el aeropuerto de Ciudad Real, por lo que consideró que se trata de «un episodio más de desvío de dinero público» a este aeropuerto.
Retirada de licencia
Mientras que la organización conservacionista SEO/BirdLife incluso solicitará al Ministerio de Fomento que se retire la licencia de vuelo al aeropuerto de Ciudad Real, debido a que esta estaba condicionada al cumplimiento por parte de los promotores privados de la Declaración de Impacto Ambiental (DIA).
La organización recordó que siempre ha mantenido que las medidas compensatorias a las que obligaba la DIA «eran insuficientes» para garantizar los valores por los que se declaró la Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA), sobre la que se construyó el aeródromo manchego.
Incluso «algunas de estas medidas eran obligaciones para Castilla-La Mancha, como la aprobación del plan de gestión de la Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA) Campo de Calatrava, donde se sitúa el aeropuerto», ha añadido SEO/BirdLife.
La organización conservacionista ha venido manifestando en reiteradas ocasiones y en diversas instancias, la vulneración de varias directivas comunitarias y las irregularidades en el procedimiento de evaluación de impacto ambiental del proyecto.
Según los conservacionistas, el aeropuerto fue construido sobre un hábitat estepario de elevadísimo valor en el contexto europeo y mundial, destruyéndose zonas de cría de especies esteparias como avutardas, sisones, gangas y ortegas.
A pesar de que el daño ambiental es irreparable, SEO/BirdLife espera que sirva como «un claro ejemplo de mala gestión de los recursos» y para que las futuras grandes infraestructuras «obedezcan a criterios sostenibles y sean correctamente evaluadas para frenar la destrucción de hábitats».
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