Andalucía supera por primera vez el medio millón de empleados públicos

Poner en contexto el tamaño de la administración andaluza es complicado. Hay que ir directamente a la lista de las mayores empresas de España para encontrar cifras parecidas. En el número uno está ACS, con 191.000 trabajadores. Le sigue Inditex, con 174.000 . ¿Y la Junta? 304.829. Es decir, hay que sumar las plantillas de las dos compañías con más personal del país para encontrar un número similar de nóminas.

Según el último Boletín Estadístico del Personal al Servicio de las Administraciones Públicas, documento elaborado por el Registro Central de Personal del Ministerio de Política Territorial, Andalucía lleva 20 años viendo cómo crecen los trabajadores al servicio de la administración. De esta forma, si en 2003 había algo más de 433.000 empleados públicos en la comunidad, ahora son más de medio millón. El crecimiento es del 17 por ciento en dos décadas.

Pero, ¿crecen todos los empleados por igual? De ninguna forma. Donde más se ha contratado en este tiempo, con muchísimas diferencia, es en la Junta de Andalucía. Así, la administración regional tenía en 2003 a 216.000 trabajadores. A finales el año pasado, esto es, casi 20 años más tarde, había superado los 304.000. Es decir, la Junta ha sumado un 41 por ciento de trabajadores en ese tiempo.

Sin embargo, ese crecimiento no es sostenido. Entre el año 2006 y 2013 se produjo un descenso —el único de la serie histórica— en los empleados a cargo de la Junta. La razón es clara: la crisis económica. Entonces, y para recortar gastos, el Gobierno central cortó el grifo de las contrataciones.

Sin embargo, ese es el único periodo de los últimos 20 años en que el personal de la Junta desciende. Entre 2003 y 2006, en pleno boom inmobiliario, la plantilla de la administración andaluza creció un 12,7 por ciento. La salida de la crisis del ladrillo provocó que entre 2013 y 2019 subiera otro 14 por ciento, el mayor alza de la serie. Y la crisis del Covid, que llevó a contratar a miles de docentes y sanitario s para hacer frente a los problemas de la pandemia, ha vuelto a engordar la nómina de empleados de la Junta. Así, entre 2019 y 2021 los trabajadores públicos andaluces han crecido otro 12 por ciento.

También ha crecido en estos años la plantilla de las administraciones locales. Un 4,1 por ciento, para ser exactos. Durante la bonanza económica de primeros de siglo subieron con fuerza, bajaron con la crisis y rebotaron con igual ímpetu después.

¿Y el Estado? En leve retirada. De 85.740 empleados públicos estatales que había en Andalucía en 2003 han pasado a 84.110, una caída del 2 por ciento. Aquí se da, además, una curiosidad. Con la crisis de 2008 subieron un 8,9 por ciento y bajaron un 9,6 por ciento al llegar la bonanza económica. Este desajuste, sin embargo, puede explicarse por la lentitud en la convocatoria de plazas y ejecutar procesos de selección una vez que se permitió la contratación al acabar el período de recesión que pasó España hasta, aproximadamente, 2018.

Las cifras de personal que se manejan en la administración en Andalucía son superlativas. Sin embargo, resultan menos llamativas cuando se ponen en contexto. ¿Hay muchos empleados públicos en Andalucía? Para responder a esa pregunta basta con comparar con el resto de las comunidades autónomas.

Si se hace una media de número de trabajadores en la administración por cada cien habitantes, resulta que Andalucía , lejos de tener muchos empleados públicos está, de hecho, en la cola de España. Así, a la cabeza está Extremadura . Con un millón de habitantes, su administración regional tiene 51.227 empleados.

Eso supone que la comunidad extremeña tiene 5,1 empleados públicos por cada cien habitantes. Le siguen Castilla y León, Cantabria y Navarra, con 4,2 trabajadores en la administración por cada cien habitantes, respectivamente. En el polo opuesto están las comunidades con menos empleados públicos. Lidera esa lista Islas Baleares, con 2,6 y le sigue Cataluña, con 2,7. Después están la Comunidad de Madrid —3 empleados públicos por cada cien mil habitantes—; Comunidad Valenciana y Canarias —3,2— y Andalucía, con 3,5.

Esta escala se mantiene casi igual cuando los datos que se toman son los del total de trabajadores públicos —nacionales, regionales y locales- . En ese caso Andalucía tiene, por primera vez en su historia, más de medio millón. Suena a una cifra enorme. Pero es que, en términos relativos son 5,97 por cada cien habitantes. ¿Dónde hay más? Castilla y León y Aragón, ambos con 7,3. Donde menos, en Cataluña, con 4,3.

Más allá de las cifras, que desvelan cómo Andalucía no está, ni de lejos, entre las zonas donde más nóminas públicas se pagan, hay que tener en cuenta que esos trabajadores son los que sostienen los servicios públicos. Son personal sanitario en los centros de salud, los bomberos que atienden las emergencias, las personas que se encargan de la gestión de las ayudas y de tramitar permisos para abrir negocios.

Según explican en la Consejería de Presidencia, Administración Pública e Interior, el crecimiento de personal público en la comunidad «demuestran la apuesta incuestionable del Gobierno» de Juanma Moreno «por reforzar los servicios sociales, más en un contexto de pandemia como el que venimos afrontando desde el 2020, haciendo especial incidencia en la Sanidad y la Educación pública». Añaden que, en un año, el número de profesionales sanitarios en Andalucía ha crecido un 18 por ciento. Lo mismo ocurre con la Educación, cuyos profesionales han aumentado un 11 por ciento, 10.997 más respecto a 2020.