La reacción de una turista al visitar Frigiliana: «Será muy bonita, pero yo aquí no vuelvo»
Un influencer en TikTok graba a su madre después de un paseo por Frigiliana y provoca las risas con sus comentarios sobre la infinidad de cuestas: «Se me está bajando la tensión»
Estos son los pueblos de Málaga considerados de los más bonitos de España
National Geographic elogia la belleza de Frigiliana: «El secreto mejor guardado de Málaga»
![Las calles de Frigiliana son empinadas y empedradas](https://s3.abcstatics.com/abc/www/multimedia/espana/2024/09/02/frigiliana-4773390-kUeB-U603018533787lTF-1200x840@diario_abc.jpg)
Que Frigiliana es uno de los pueblos más bonitos de España es algo que muy pocos se atreverían a negar. Tanto es así, que es el pueblo de Andalucía más buscado en Internet. Sin embargo, hay un detalle que suele pasar desapercibido en las guías de viaje y que puede estropearte la visita si no vas preparado: las cuestas. Y si no, que se lo digan a la madre de JJ Reyes, un tiktoker que triunfa en esta red social grabando sus divertidas y espontáneas reacciones.
A pesar de que Frigiliana es uno de los pueblos más encantadores de Málaga, su belleza y pintoresca arquitectura tienen un pequeño inconveniente: la empinada geografía de sus calles, motivo de queja para algunos visitantes.
«Madre mía, Frigiliana, no vengo más»
En esta ocasión, JJ Reyes, que cuenta con casi 13.500 seguidores, ha publicado un vídeo en el que recoge la reacción de su madre tras un paseo por Frigiliana. La respuesta sincera y espontánea de esta mujer causa las risas de numerosos espectadores. «Madre mía, Frigiliana, no vengo más», llega a decir en un momento de cansancio absoluto.
@jjreyes La probabilidad de que mi madre vuelva a Frigiliana es del 0% 🏘️ #fyp #parati #viral ♬ sonido original - JJ Reyes
La mujer, visiblemente cansada, no duda en reconocer la belleza de Frigiliana, comentando que el pueblo «es muy bonito». Sin embargo, su agotamiento se hace evidente cuando añade con determinación: «Pero yo aquí no vuelvo».
Frigiliana, un pueblo encantador con cuestas desafiantes
Frigiliana, situado en la comarca de la Axarquía, es famoso por sus calles empedradas, casas blancas adornadas con flores y su herencia morisca. Este pueblo, considerado uno de los más bonitos de España, atrae a miles de turistas cada año que desean experimentar la autenticidad de un lugar que parece haberse detenido en el tiempo.
Sin embargo, su geografía montañosa, que contribuye a su singular encanto, puede convertirse en un desafío para quienes no están acostumbrados a caminar por pendientes pronunciadas. Este fue precisamente el caso de la turista que protagoniza el vídeo, quien, tras recorrer las empinadas calles de Frigiliana, expresó su agotamiento y frustración. «Se me está bajando la tensión», llegó a afirmar la mujer, a la que ni siquiera las impresionantes vistas pareció ayudarla: «Hasta las vistas me están dando igual».
La dualidad de Frigiliana: una belleza que exige esfuerzo
La reacción de esta turista refleja una dualidad que muchos visitantes pueden experimentar al visitar Frigiliana. Mientras que su encanto arquitectónico y sus vistas panorámicas son innegables, recorrer sus empinadas cuestas puede ser agotador, especialmente en días calurosos o para personas con movilidad reducida.
A pesar de las cuestas, Frigiliana sigue siendo un destino muy recomendado para aquellos que buscan disfrutar de la auténtica belleza andaluza. Las calles empinadas, aunque desafiantes, forman parte del carácter único de este pueblo, que combina historia, cultura y naturaleza en un solo lugar.
El curioso gentilicio de los habitantes de Frigiliana
Según el Diccionario de la Real Academia Española (RAE), un gentilicio es un adjetivo que «denota relación con un lugar geográfico». Por esta razón, numerosos gentilicios suelen formarse a raíz del nombre del municipio o localidad al que se pertenezca.
Aunque el gentilicio oficial de Frigiliana es frigilianense, a los oriundos de este impresionante pueblo montañoso de la Axarquía malagueña también se les conoce como aguanosos. Todo se remonta al siglo XIX, cuando Frigiliana era uno de los principales exportadores de albaricoques, conocidas por ser «las más buenas y aguanosas».
Poco a poco, el término fue pasando de los albaricoques a los propios habitantes y vecinos de Frigiliana, a los que muchos pasaron a llamarlos aguanosos en referencia a la calidad de sus frutas. Este es uno de los gentilicios más raros de Málaga.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete