Los cromos cofrades que han revolucionado la Semana Santa de Sevilla llegan a Málaga

En los patios de los colegios de Málaga, donde ahora se cambian cromos de Pokemon o de La Liga, Pikachu y Modric ya no serán las estrellas. A partir de este otoño los niños tendrán en sus manos para jugar a La Esperanza, El Cautivo o a la Virgen del Rocío. Las cofradías también serán coleccionables. Holy Cards, álbum que ha revolucionado la Semana Santa de Sevilla tendrá, a finales de año, también su versión en Málaga.

El acuerdo lo ha anunciado este miércoles la propia Agrupación de Cofradías de Málaga. De este modo, se sigue el 'boom' que la idea tuvo en Sevilla, donde en una primera tirada se crearon 10.000 álbumes, que se vendieron en sólo diez días. La empresa tuvo que editar otros 25.000 más para poder cubrir las peticiones que tenían pendientes. «Ha sido el regalo estrella de esta Navidad», reconoce Juan Carlos Ramos Picchi, uno de los creadores.

La iniciativa ha recibido premios, ha sido bendecida por todas las hermandades y hasta puesta como ejemplo de catequesis por el arzobispo de Sevilla. Una revolución dentro del mundo cofrade sevillano. «Estaba pensado para los niños, pero hemos visto cómo lo coleccionan también los mayores», reconoce el creador, quien explica que Málaga siempre había sido una ciudad en la que querían estar presentes con esta idea.

De hecho, Picchi reconoce que ya distribuyen en Málaga la colección de la Semana Santa de Sevilla. «En Málaga ya tenemos clientes que coleccionan las estampitas de Sevilla, pero ahora queremos llevar las de Málaga», afirma el creador, quien explica que hace unos meses hablaron con la Agrupación de Cofradías y que ahora están en la producción de los cromos y los álbumes.

El punto actual del proyecto es ver las imágenes que hacen falta y organizar toda la producción para poder sacar adelante la colección de cromos. Las fotos para los cromos hay que hacerlas esta Semana Santa. Será después de que pase la celebración, el momento en el que las hermandades conozcan a fondo el proyecto, en el que las cofradías de Sevilla se han volcado hasta con un apartado solidario.

Al salir los cromos, Holy Cards le dio una serie de paquetes a las hermandades para que las vendieran y para que los fondos conseguidos fueran a la bolsa de caridad de cada entidad. «Cuando se acabaron, no pidieron más. Ahora se vende en todas las cofradías, a las que se las facilitamos a un precio inferior», afirma Picchi.