Fincas, ríos y pozos: la Guardia Civil busca el rastro del jornalero desaparecido en Villacarrillo

La Guardia Civil intenta buscar pistas sobre el paradero de Ibrahima Diouf. El jornalero desapareció el pasado 5 de enero de 2021 en Villacarrillo (Jaén). Su familia relató que después de discutir con el empresario que lo tenía empleado en un olivar se le perdió el rastro. No llegó a subir al autobús a Cartaya (Huelva), donde iba a empezar una nueva vida. El grupo de desaparecidos de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil trata de hallar su pista oculta en el tiempo.

Son ya 22 meses desde que se le vio por última vez, ya no quedan ni carteles de búsqueda en el pueblo. Resolver su desaparición puede aclarar también la de Tidiany Coulibaly, otro empleado de este patrón cuyo paradero sigue siendo un misterio ocho años después.

Hace dos meses criminalística, guías caninos y hasta un georradar desembarcaron en este municipio de Jaén. Entraron en varios garajes, en casas y una parcela donde había vivido el desaparecido. Pusieron todo patas arriba, se llevaron muestras y hasta los buzos entraron un pozo para buscar alguna pista. Confirmaron que el desparecido había vivido allí, pero el escenario había sido contaminado. Después de un año y medio desde que se puso la denuncia, el lugar hasta había sido ocupado y muchos de los restos de su presencia destruidos.

Aun así, la investigación siguió. Unas semanas más tarde, los equipos recalaron en 'El Molinillo', el olivar donde había trabajado en Villanueva del Arzobispo. Allí buscaron los restos de Ibrahima sin éxito. El georradar se empleó varias jornadas sin éxito. Abrieron hueco en la tierra y los guías caninos inspeccionaron, pero los equipos de investigación tuvieron que regresar sin nada concluyente que aclarara la desaparición.

La tercera búsqueda fue en la piscinas naturales de Mogón. En esta ocasión fueron los buzos del Grupo de Actividades Subacuáticas los que rastrearon los fondos de estos estanques. «Hay que ir descartando lugares», señalan fuentes de la investigación, que creen que el jornalero está muerto. La misma hipótesis que tiene su hermano Moussa en Lepe, desde donde sigue el devenir de la investigación esperando noticias sobre el desaparecido. Las piscinas naturales tampoco fueron el último intento.

Esta semana, durante un par de días, la Guardia Civil se desplegó en 'La Moratilla' en Villanueva del Arzobispo. El olivar ha quedado precintado tras las pesquisas. En este lugar, durante la búsqueda de Coulibaly hace ocho años se hallaron restos y orejeras del jornalero. En esta ocasión se han empleado el georradar rastreando el suelo y posibles movimientos de tierra.

Esta cuarta búsqueda ha acabado con el registro de la casa de patrón, que está investigando, pero no detenido. «Es una cosa que había que ver», explican las fuentes, que añaden que ha sido un registro a fondo del domicilio, pero que en este lugar no se buscaba el cuerpo del senegalés.