Un tribunal de Italia ordena que el hijo menor de Juana Rivas regrese «de inmediato» con su padre
La Corte de Apelación de Cagliari falla a favor de Francesco Arcuri, al que otorga la custodia del niño, y establece que su madre sólo podrá visitarlo en Cerdeña
El abogado de la granadina anuncia que recurrirá la sentencia y asegura que ésta «no anula» la decisión cautelar que permitió al chico seguir con su madre
Archivan otra denuncia de Juana Rivas por no aportar nada nuevo respecto a otras anteriores

La Corte de Apelación de Cagliari (Italia) ha otorgado a Francesco Arcuri la custodia de su hijo Daniel, de once años, y ha ordenado a su expareja, la granadina Juana Rivas, que lo devuelva «inmediatamente» a la ciudad de Carloforte, donde tiene fijada su padre la residencia.
La sentencia, a la que ha podido acceder parcialmente ABC y que ha sido confirmada por Enrique Zambrano, abogado de Arcuri en España, establece, además de esos dos puntos fundamentales, un régimen de visitas que sólo permite a Juana Rivas ver a su hijo menor -tienen otro en común, Gabriel, que ya ha cumplido los 18 años- en la isla de Cerdeña, donde se ubica Carloforte. Y únicamente los fines de semana, entre el viernes y las 16.30 horas del domingo.
También le permite estar con su hijo quince días consecutivos en la primera mitad del mes de julio y otros tantos en la primera mitad de agosto. La mitad de lo que cueste el viaje lo pagará Arcuri. Por último, ordena que una «unidad de neuropsicología de la infancia y de la adolescencia» se ocupará desde Italia «del necesario soporte psicológico y psicoterapéutico» del menor.
En un párrafo, la sentencia habla sobre Juana Rivas en términos que no la dejan en muy buen lugar: «Ignoraba por completo el daño psicológico que había causado en los niños, al separarlos de su padre durante más un año. No se da cuenta de las consecuencias reales y psicológicas de sus acciones para los niños; muestra un funcionamiento psíquico gravemente patológico, asociado a una desorganización del pensamiento; ha demostrado grandes habilidades de manipulación hacia menores de edad, su competencia parental se ve gravemente afectada y su atención no parece estar en hijos sino sobre la violencia de género que sufre su expareja».
Daniel lleva con su madre en España desde que vino a pasar las Navidades en Granada con su madre. Debía regresar el 8 de enero, pero in extremis, un día antes, el Juzgado de Instrucción número 4 de Granada, tras escuchar al menor, determinó que podía quedarse provisionalmente.
Conflicto internacional de competencia jurídica
Ahora, la cuestión estriba en si prevalecerá esa orden dictada desde Italia o la jurisdicción española. Según el abogado de Rivas, Carlos Aránguez, el menor está en España y las orden de regreso a Italia, en todo caso, la deberá ratificar un tribunal español.
«Esta decisión no es firme, y por supuesto ejercitaremos el correspondiente régimen de recursos», ha avanzado el letrado, que ha destacado que esto «no afecta a la medida cautelar de protección que, en el ámbito penal, se adoptó en la jurisdicción española, por la que se acuerda que el menor no regrese con su padre».
«Nos encontramos ante un menor de 11 años que ha expresado ante un Juzgado español que siente terror a volver a vivir con su padre. Daniel se queda en España, y seguiremos ejerciendo todas las acciones que garanticen su derecho a una vida libre de violencia», ha añadido Aránguez.
Quedan por resolver, además, las demandas por presuntos malos tratos hacia sus hijos -violencia vicaria- por parte de Francisco Arcuri que han sido denunciadas por Juana Rivas tanto en Italia como en el Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 2 de Granada. Ayer, el otro juzgado relacionado con la mujer de la provincia granadina archivó otra denuncia similar por no contener elementos distintos de los ya denunciados.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete